El presidente de Chile, Sebastián Piñera, anunció este miércoles la entrada en vigor de una nueva ley que reforma los cuerpos policiales, criticados y en el punto de mira desde las protestas que estallaron en 2019.
Esta nueva norma forma parte de una agenda de seguridad que fue impulsada a raíz del estallido social que comenzó en Chile el 18 de octubre de 2019, la ola de protestas más graves desde el fin de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), y entra en vigor a escasas tres semanas de que asuma el poder el nuevo presidente electo, Gabriel Boric.
Agregó que la policía es «la principal herramienta que tiene el Estado para poder combatir el delito, la delincuencia, el narcotráfico y el terrorismo, y esta misión se debe cumplir con mucha eficacia, pero siempre dentro del marco de la ley y con pleno respeto de los derechos y libertades», indicó Unión Radio.