Aunque los precios de los productos de primera necesidad aumentaron con la finalidad de que se detuviera la escasez, esta situación no ha terminado.Las familias tequeñas siguen peregrinando por abastos y supermercados para encontrar lo que necesitan. La queja general ya no es solo la falta de artículos, sino su alto costo.
Muchos, apenas llega algún producto, hacen la cola sin pensarlo mucho, de hecho, se puede observar cómo la gente se pone en fila sin tener seguridad de qué llegó.
El equipo reporteril de Avance recorrió los establecimientos más concurridos, a fin de verificar cómo está el abastecimiento de rubros imprescindibles.
Algunos artículos subieron el doble. Aquí le ofrecemos una breve lista para que tenga una idea:
- El aceite subió de Bs. 10,50 a 29
- Café de Bs. 6 a 12,50
- Arroz de Bs. 7,50 a 9,50
- Papel higiénico de Bs. 17 a 34,25
- Margarina de Bs. 18 a 26
“Lo que consigue es graneadito”
Varios de los artículos que estaban escasos ahora se consiguen, pero en presentaciones especiales y no las reguladas. En el caso del arroz, Fresco Market y Automercado Express lo tienen en las marcas Mónica y Mari a Bs. 9,50, además de otras variedades con sabor a vegetales y pollo.
“Se puede decir que hay una ligera escasez de arroz regulado porque nos están trayendo menos del que pedimos. La última vez solicitamos 100 bultos y solo nos trajeron la mitad”, explicó Víctor Trevizón, gerente del Express.
La margarina es otro caso particular, pues aunque se encuentra, no hay de la tradicional Mavesa. En algunos locales se halla Vigor por Bs. 21 y Rendidora entre Bs. 21 y 25.
En general, hay problemas con la distribución de aceite regulado, aunque subió más de doble. El lunes, luego de casi tres meses, el Mazeite llegó al San Diego, mas las cantidades no alcanzaron para satisfacer la demanda.
De este artículo se pueden encontrar otras marcas más costosas como Natural Oil en Bs. 61,34 y Portumesa en Bs. 83,9. El Mazeite pasó de Bs. 10,50 a 29, lo que se traduce en un aumento de más de 100%.
Se pudo comprobar que hay pasta en todos los establecimientos, incluso variedad de precios y presentaciones: larga, corta y hasta integral, pero los precios superan los Bs. 40, cuando la regulada vale Bs. 5,30.
La leche en vías de extinción
La leche en polvo es de los más buscado por las familias tequeñas. Quienes tienen suerte de hallarla es porque llegaron a tiempo a un Mercal. Establecimientos como Superlíder la reciben de vez en cuando, mientras que otros como el Express siguen a la espera, luego de haberla solicitado hace un año.
“El problema es que como este local es relativamente nuevo, no nos abren código para distribuirnos leche. Como la demanda es muy grande, no aceptan nuevos establecimientos”, aclaró Trevizón.
El papel higiénico está en todas partes; en este caso parece que el incremento de precios favoreció su distribución. Solo en Makro, donde venden al mayor, había restricciones pues cada cliente podía llevar un máximo de cuatro paquetes de cuatro rollos.
La harina de maíz se está viendo más
La situación de la harina de maíz no se ha regularizado por completo, los establecimientos no reciben las cantidades que les piden a los proveedores; sin embargo, hay locales como Superlíder y Express adonde llega el apreciado producto todas las semanas.
Normalmente, los clientes pueden llevar seis unidades, todo dependerá de la cantidad que les surtan. Todavía hay problemas para comprar este producto, aun cuando aumentó su valor en casi 50%.
Tequeños explican su situación
“Cuesta mucho conseguir las cosas, tengo dinero pero no encuentro qué comprar, debo ir a varios sitios”, manifestó Carolina Jerez.
Para Antonieta Morín, “todo está demasiado caro y no se puede comprar mucho. No consigo harina PAN, compro verduras y lo que puedo. Solo como pollo dos veces por semana”.
“Lo único que se encuentra es papel y azúcar, de lo demás no hay. No tenemos ni jabón para lavar la ropa”, enfatizó Dayana Medillo.
“Harina de maíz nada que ver, y la leche la he buscado por todos lados y tampoco la encuentro”, puntualizó Rosa Carrasco./ac
Por: Skarlet Nieto/Foto: Daniel Linares