Padres rechazan que los alumnos reciban clases en medio del foco infeccioso

La intranquilidad se apodera de los padres y representantes de los estudiantes de la Unidad Educativa Egui Arocha, en San Antonio de los Altos; ante el colapso de una tubería de aguas servidas que brotó en medio del patio central de la institución, hecho ocurrido el martes 7 de octubre.

La madre de un alumno de bachillerato, quien solicitó a Avance la reserva de su identidad, aseveró que “es inaudito que los muchachos sigan recibiendo clases en medio de ese foco de infección, cuando llueve es mucho peor porque esa agua también se anega en el mismo punto”.

A principios de 2025 el liceo fue intervenido, por causa del sistema de autogestión creado por los propios representantes para sufragar los déficits en el plantel; acción que quedó prohibida y derivó en que estos temas de mantenimiento presuntamente dejaran de atenderse, “por lo que ahora empiezan a salir al ruedo problemas que pudieran solventarse con el apoyo de todos nosotros”.

Falta de información

Otro representante reprochó que no tuvieran acceso a ningún tipo de información en cuanto a la falta de implementos para trabajar a nivel docente, administrativo u obrero; datos que les servían para armar las acostumbradas vaquitas.

“Si uno de nosotros es plomero no puede ayudar, porque está prohibido. Bien pudiéramos resolver nosotros lo del bote de aguas servidas, pero estamos de manos atadas. Nuestros muchachos están expuestos a afecciones respiratorias y de la piel”, aseveró.

Avance intentó contactar a la actual directora, sin conseguir respuesta de su parte; a pesar que se dejó en la institución información del contacto disponible para que pudiera explicar el estatus del problema de la tubería averiada.