13/05/15.- Solo agua, azúcar y caramelos recibieron los 182 privados de libertad en los calabozos de la Policía de Miranda, quienes se declararon en huelga de hambre para protestar en contra del hacinamiento y el retardo procesal.
Algunos familiares se aglomeraron en la entrada de la comandancia, en la avenida Bicentenario de Los Teques, para entregarles la cena, pero tanto hombres como mujeres se negaron a ingerir alimentos hasta que el Ministerio de Servicios Penitenciarios les otorgue cupos para su traslado a recintos penitenciarios o les agilicen los juicios, los cuales tardan hasta más de un año para ser finiquitados.
Por: Andreína Ibarra / Foto: Abraham Gutiérrez