“Es muy raro que compre jamón para llevar a mi casa, eso es un lujo, queso llevo a veces el rallado y en muy pocas ocasiones, no siempre puedo pagarlo y ahora que todo está más caro es aún peor, realmente los embutidos no son de primera necesidad”, señaló Teresa Delgado, quien intentaba llevar múltiples artículos en su carrito de compra.
Al realizar un recorrido a través de distintas charcuterías pudo constatarse que los precios del jamón de pierna y de pavo pueden superar los Bs.100, mientras que el costo de los jamones de fiambre o la mortadela oscila entre los Bs.30 y Bs.51 dependiendo de la marca y el local de venta.
Ante esta realidad, gran parte de los ciudadanos de los Altos Mirandinos, han optado por dejar de llevar estos alimentos a casa, basando su dieta principalmente en carbohidratos, con harinas de maíz y trigo o arroz y pasta.
“Antes en cualquier momento ibas a una charcutería y llevabas de todo, ahora no. Si acaso 100 gramos de alguna cosita y no siempre, es desalentador ver las vitrinas y congeladores llenos de productos que te gustan, pero no poder llevar ninguno contigo”, declaró Paola Herrera, madre. /DB/ct
Luis Maizo