Una licenciada en Química relata el calvario que vive con su expareja

Una mujer de 40 años, licenciada en Química, empleada del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC) se siente amenazada y acosada por su expareja, un hombre de 44, biólogo, quien trabaja en la misma institución.

Los dos mantuvieron una relación sentimental por más de una década. Tras constantes discusiones y peleas terminaron en malos términos en 2021. “A pesar de que ya estamos separados cada vez que quiere me agrede  psicológicamente, me insulta, me dice que soy de lo peor, que soy una basura”,  señaló la víctima en diálogo con Avance.

Las agresiones más fuertes comenzaron en 2017, cuando aún vivían juntos. “En una oportunidad me golpeó por las piernas, dejándome moretones, me haló fuerte por el cabello. Me lanzó contra el piso, me causó una lesión en la cervical que hasta el día de hoy me genera dolor al voltear al lado izquierdo”.

En otra ocasión después de golpearla, “me mantuvo secuestrada en mi casa durante dos días, me quitó las llaves, mi celular, estuve incomunicada durante ese tiempo. No podía gritar para que me escucharan mis vecinos por temor a que hiciera algo peor”.

Después de múltiples maltratos,  ella decidió dejarlo y denunciarlo. El 27 de marzo de 2021 acudió al Ministerio Público donde consignó un escrito en el cual detallaba cada episodio de violencia que había vivido hasta ese momento. El 19 mayo de ese mismo año la Fiscalía Segunda de la Circunscripción Judicial del estado Miranda impuso medidas de protección y seguridad.

Le prohibieron a Carlos Armando Pérez Silva,  presunto agresor, acercársele en su residencia, lugar de trabajo o cualquier espacio público. También le prohibieron a él o a terceras personas perseguirla, intimidarla o acosarla no solo a ella sino a algún miembro de su familia.

En octubre de 2022, ocurrió un incidente en el sitio de trabajo de ambos. “Se dirigió a mi con una actitud desafiante, hostil, grosera. No le paró a la orden de la Fiscalía de mantener el distanciamiento”. Todo lo que pasó quedó reflejado en un acta levantada por el Departamento Seguridad y Vigilancia del IVIC.

Ciclo de violencia

A principios de febrero de este año, ante otro  ataque se vio obligada a ir a Polimiranda. Ahí le volvieron a dar otra medida de protección, que él supuestamente no ha respetado.

Ellos tienes dos niños, una hembra de seis años y un varón de cinco. Acordaron que los niños están una semana con la madre y otra semana con el padre. “Cuando están conmigo es un conflicto, los va a buscar al colegio sin avisarme, cuando yo llego a buscarlos ya él se los ha llevado. El lunes 18 llegó a mi casa en San Antonio de los Altos cuando un familiar estaba recibiendo a los muchachos entró y se robó unas cosas y después se llevó a la brava a los niños”.

Ante este nuevo hecho, este martes 19 se trasladó a Polisalias para denunciarlo una vez más. Varios oficiales se fueron al IVIC para buscarlo. Los uniformados entraron y hablaron con la consultora jurídica del instituto, “y cuando salieron uno de los policías me dio a entender que no podían hacer nada porque no me vio a mi golpeada”.

“En ese momento llamo a mi abogada le explico lo que está sucediendo le paso al efectivo a quien le exige que cumpla el procedimiento. Cuando el agente accede a buscar al agresor, como que en vigilancia le avisaron y ya no estaba por ahí. Luego todos nos dirigimos a Polisalias y el agresor estaba allí en el comando”.

Se siente revictimizada

En Polisalias luego de hacerla esperar un buen rato la recibió la funcionaria Esmeralda Rodríguez, coordinadora de Atención a la Víctima. “No procesaron la denuncia, alegaron que él tiene derecho a estar con sus hijos, los puede llevar y traer a  la escuela. Yo refuté porque hay  un convenio al que  llegamos los dos, una semana él y otra semana yo. Trataron de decirme que las medidas de protección son de Polimiranda  por lo tanto tenía que ir allá, pero este incidente está pasando en San Antonio”.

“Esa señora (Esmeralda Rodríguez) me trató a las patadas, no me dejaba hablar, casi me dijo que yo era una bruta porque dije que fui a la Lopnna y la oficial respondió que la Lopnna es un libro y los libros no hablan. Se burló de mi como le dio la gana, lo que hacia era reírse en mi cara”, manifestó la mujer en medio del llanto.

Se preguntó: “¿Será que tengo que venir con un tiro en la cabeza?, con una puñalada para que me atiendan o actúen. “¿Qué van a esperar?, que  él me mate. Esa policía hasta me dijo que si yo había ido a terapia psicológica, por supuesto que he estado en manos de especialistas y en tratamiento por depresión. Me siento revictimizada”.

“Los ataques de ese hombre en mi contra no han cesado, por el contrario han crecido. Me siento desprotegida, muy vulnerable. Todo esto me causa angustia”.

Este miércoles 20 de marzo bien tempranito, la mujer fue a la sede del Ministerio Público en la calle Miquilén en Los Teques a poner una nueva denuncia. Ya perdió la cuenta de las denuncias que ha hecho en contra de Carlos Armado Pérez Silva. Espera que esta vez sí surta efecto.

Polisalias responde

Sobre los señalamientos que hizo la agraviada en contra de la oficial Esmeralda Rodríguez coordinadora de Atención a la Víctima de Polisalias se pronunció el director del cuerpo policial José Gregorio Landaez. “Ella llamó para acá, nosotros nos trasladamos hasta el IVIC. Nosotros  sí la atendimos. Tenemos videos donde se ve la actitud violenta que asumió la señora porque argumenta que nosotros estamos parcializados con su expareja”.

Recalcó que antes de que la mujer llegara el comando ya estaba el hombre denunciándola por acoso, hostigamiento. “Él manifiesta que ella no le permite que vea a sus hijos. Este miércoles nosotros notificamos la situación al Ministerio Público y al Consejo de Protección de Niña, Niño y Adolescente”.

“Ella sostiene que tiene una medida de protección pero en ningún lado está esa medida según lo que me están informando a mi. La ciudadana tiene varias citaciones en el Consejo de Protección a las que nunca ha asistido, desconocemos las razones por las cuales no ha acudido”, puntualizó.

De víctima a victamaria

Este martes 19 de marzo el hombre denunció ante la Coordinación de Atención al Ciudadano de Polisalias que teme por su integridad física, debido a las reiteradas veces que la mujer lo insulta y lo golpea.

En un escrito firmado por la inspectora jefa  Dilicia Mijares, coordinadora de la dependencia se lee que el lunes la fémina le gritó y le armó un escandalo al individuo en el complejo cultural y deportivo en la avenida Perimetral. “El caso fue remitido a la Unidad de Atención a la Victima”, señala la comunicación.