Las derrotas siempre son buenas para que un atleta despierte y regrese al sitial que perdió, así ha estado pasando con el español Rafael Nadal, quien después de mucho tiempo parece estar de vuelta y está confirmando que 2017 es su año, demostrándolo una vez más este domingo al conquistar el Masters 1000 de Montecarlo.
Nadal derrotó en sets corridos a su compatriota Albert Ramos por 6-1 y 6-3, haciendo valer su hegemonía sobre tierra batida, siendo este su título número 50 en esta superficie. El de Manacor además se erigió como el rey del Principado, tras lograr su décimo trofeo en este torneo y el número 70 de toda su carrera, así mismo fue el 29° de Masters 1000.
Nadal venía de perder tres finales este año: en Australia, Acapulco y Miami, y en dos de ellas perdió con Roger Federer, pero en Montecarlo él tuvo la última palabra para decir: “Estoy de vuelta”. El ibérico se sigue preparando para su verdadero reto; el Roland Garros.