Los Nacionales empezaron a recuperar piezas claves como el receptor venezolano
El receptor venezolano de los Nacionales de Washington, Wilson Ramos, salió de la lista de incapacitados el miércoles y vio acción por primera vez desde el primer día de la presente temporada. El guardabosque Scott Hairston, quien se perdió 26 compromisos debido a una lesión en un músculo del costado izquierdo, fue activado por los Nacionales el lunes. El diestro Doug Fister, la pieza clave que adquirió Washington durante la temporada baja, estaba programado para hacer su debut de la temporada ayer ante los Atléticos en Oakland.
Los capitalinos aún están sin el antesalista Ryan Zimmerman (pulgar derecho fracturado) y el jardinero izquierdo Bryce Harper (ligamento desgarrado en el pulgar izquierdo), pero la sensación es que el club está comenzando a tomar forma. “Hemos resistido bastante bien los malos ratos aquí. Creo que estamos a punto de entrar en nuestro mejor momento”, dijo el relevista Jerry Blevins. “Nos estamos desenvolviendo, tratando de entender quiénes somos como equipo y ahí saldremos adelante”.
Ramos representa una pieza clave de las esperanzas del club. La temporada pasada, encabezó al equipo en carreras producidas después del Juego de Estrellas a pesar de que bateó mayormente en la parte baja del lineup. Tan buen concepto tiene el manager de los Nacionales, Matt Williams, de Ramos, que lo colocó como cuarto bate en su primer partido de regreso y el criollo respondió con hit en dos turnos y carrera impulsada.
“Tiene la habilidad de empujar carreras”, dijo Williams. “Se mantiene calmado al bate a pesar de la situación. Entiende la zona de strikes. Tiene experiencia en esa situación, así que da gusto tenerlo de regreso”. Por su parte, Ramos dijo sentirse emocionado, pero no nervioso. “No es la primera vez que salgo de la lista de incapacitados”, señaló el carabobeño de 27 años que está en su cuarta campaña en las mayores.
Aun con todo su talento, Ramos ha tenido mala suerte. Después de la temporada de 2011, fue secuestrado en Valencia. En 2012, se desgarró un ligamento de la rodilla derecha. El año pasado, padeció dos lesiones en la corva izquierda. Y esta temporada, se fracturó un hueso de la mano izquierda en el Día Inaugural.
Ramos ha acolchonado su guante para proteger la muñeca, pero dijo sentirse bien el miércoles, aun después de recibir las rectas de 100 millas por hora del lanzallamas de Washington, Stephen Strasburg. “Tengo algunas molestias, como me dijo el médico. Dijo que me dolería un tiempo,” expresó Ramos. “Pero no estoy mal. Puedo salir a jugar y quiero seguirlo haciendo”.
Los Nacionales iniciaban ayer una serie de tres juegos ante los Atléticos en un estadio de la Liga Americana, lo cual le da a Williams la opción de utilizar como bateador designado a Ramos, a quien no le importa dónde juegue. Simplemente está contento de estar de regreso al equipo. “Estaré listo para lo que sea”, dijo Ramos. “Aprovecharé cada oportunidad que el manager me dé. Llevo esperando como cinco semanas por esto, así que estoy contento de estar aquí, de regreso con el equipo”.