Antes de bajar las santamarías algunos propietarios de restaurantes decidieron reformular los menús con la administración de forma de equilibrar la proteína animal en los platos, para poder mantener los precios de los almuerzos que se venden entre $ 7 y $ 10.

Margarita Loaiza tiene un puesto en el sector El Encanto y explicó que desde que comenzó aumentar los importes del pollo, carne de res y cochino ha tenido replantear las presentaciones, sin alterar la cantidad y calidad del servicio”.

“Bueno, he tenido que jugar sobre todo con la proteína. Por lo menos el pollo el proveedor mantiene al mismo precio”.

Destacó que entre los almuerzos más económicos está el hígado de res, callos a la madrileña, milanesa a la plancha, pollo rebosado y a la broster.

“Lo que anteriormente compraba en Forum a $3.99 el kilo de costillas, ahorita me lo aumentaron en $4.69, mientras que en el Mercado Municipal de El Paso pasa en los $5 dólares. Todavía puedo mantener el precio de la sopa, pero la panza, la pata de res ya cuesta $3.07, es difícil mantener los precios para estás preparaciones”.

Jugar con las proteínas

Destacó que el pescado y cochino es lo más caro y por ende aumentó el valor del plato.

“El kilo de cochino lo consigo entre $8 y $8,5 y lo vendo con tres contornos en $10. Entonces hemos tenido que jugar con los precios que se comparan con otros negocios”.

Destacó que cuenta con una clientela fija que conoce la calidad de la comida y regresan, pero la afluencia de nuevos comensales es escasa. “Ha disminuido porque ven los precios y se van a buscar en otros sitios más económicos que se ajusten a su presupuesto”.