18/08/15.- Bruce Rondón ha pasado dos temporadas y media como el cerrador del futuro de los Tigres de Detroit. Ya es hora de descubrir lo que el relevista derecho venezolano puede hacer en ese papel.
Eso no significa sólo ver si puede cerrar los juegos en el noveno, sino también ver cómo reacciona cuando desperdicia una oportunidad de salvamento. Respecto a eso, el sábado fue una buena prueba, incluso después de que ya no era una oportunidad de rescate.
El primer rescate desperdiciado para Rondón vino rápido, ante los Astros de Houston, apenas una semana después de haber sido nombrado como el cerrador del equipo por el manager Brad Ausmus.
Con cuenta de 1-2 en contra Preston Tucker, lanzó una recta de 100 millas por hora que fue conectada a 108 mph. Fue un batazo en línea de cuadrangular al jardín central, que sirvió para empatar un juego.
Fue un lanzamiento con el que el venezolano y el receptor James McCann coincidieron, según McCann, y uno que Ausmus apoyó, aunque fue más abajo en la zona de lo que los tres esperaban que fuera.
La oportunidad de salvamento se había terminado, pero el juego no. Rondón tenía el marcador 1-1 y venía la parte gruesa de la alineación de los siderales sin un out en la pizarra.
Luego de que Anthony Gose realizara un out con un atrapada lanzándose de cabeza para retirar a Carlos Correa, Jed Lowrie conectó sencillo a un cambio de velocidad en 0-2 para poner la potencial carrera de la victoria en base.
Venían Carlos Gómez y Colby Rasmus con la oportunidad de ganar el partido. Rondón respondió con su mejor lanzamiento al abanicar con un slider a Gómez tras colocarlo en 0-2 con rectas y a Rasmus con la cuenta llena.
Luego de esta experiencia, el venezolano tendrá la oportunidad de demostrar qué aprendió muy pronto. La próxima oportunidad de salvamento de los felinos la tendrá Rondón, confirmó Ausmus.