Se impuso ante una gran Angelique Kerber
Serena Williams se impuso ante una gran Angelique Kerber, que a pesar de jugar su gran partido no pudo repetir su gesta de Australia y esta vez sucumbió ante el poder de la estadounidense con parciales de 7-5 y 6-5 para llevarse el Wimbledon.
En un encuentro que terminó en una hora y 23 minutos estuvo marcado por la gran efectividad de ambas tenistas, pero el poderío de Serena Williams apareció siempre en momentos claves y con dos veces que consiguió quebrar se llevó el partido.
Igualdad hasta el primer quiebre
Las dos tenistas se enfrascaron en una lucha en la que Serena Williams ganaba por su increíble saque y Kerber por la habilidad que mostró para abarcar todos los espacios de la cancha. La tenista americana estuvo increíble con el primer servicio, consiguiendo 88% de acierto, además de que sacó a relucir su ace (hizo 13 en el partido), un arma muy efectiva y que le hizo falta en las otras dos finales que perdió (Australia y Roland Garros).
La igualdad que se mantuvo por 11 juegos, en el número 12 Serena Williams brilló y logró un quiebre, cuando en el juego anterior estuvo a punto de perder su saque, consiguiendo así llevarse el primer set del partido.
El poderío de Serena Williams
La defensora del título comenzó el segundo set como una aplanadora, sin embargo Kerber demostró que no se rendiría tan fácil, por lo que la estadounidense tuvo que luchar en algunas ocasiones contra el ímpetu de la alemana.
Nuevamente, tras una situación difícil en la que Serena Williams pudo ganar su saque e irse arriba 4-3, en el siguiente juego logró quebrar una vez más el saque de Kerber. Ya con el partido 5-3 y Serena dependiendo de su servicio para ganar todo fue muy fácil para que acabara con el 6-3 final que le daba el título.
La menor de las Williams cosechó su séptimo título de Wimbledon, igualando en este aspecto a Roger Federer; y además conquistó su título número 22 de Grand Slam empatando en ese apartado con Steffi Graf, ahora está a solo dos títulos de alcanzar a una leyenda como Margaret Court (24 títulos).
Serena Williams ya se quitó un peso de encima (empatar con Graf), todavía le queda un reto por delante y con el US Open tan cerca buscará conquistar su título 23 para quedar a solo un paso de encumbrarse aún más en la historia del tenis.