La nueva “Dama de Hierro” ha sido un título prácticamente inevitable para Theresa May, la nueva primera ministra del Reino Unido. Y aunque esta líder conservadora ha expresado admiración por su predecesora, también ha dejado claro que quiere recorrer y marcar su propio camino. Conozcamos en sus propias palabras, el lado más humano de la más reciente inquilina del número 10 de Downing Street.

“Mi discurso es muy sencillo: me llamo Theresa May y creo que soy la mejor persona para gobernar este país”.

De familia humilde, educada en colegios públicos y religiosos hasta lograr su pase a Oxford, May viene a ser la antítesis de las generación de políticos que pasaron por la elitista Escuela Eton y recuerda siempre que el deber del partido es mirar más allá “de los pocos y privilegiados”.

“Soy como Indiana Jones: no me gustan las serpientes. Aunque esto podría hacer que algunos se preguntaran por qué me dedico a la política”.

Lo suyo no son las piruetas, sino el paso firme, dicen sus allegados / Foto: AFP

Esta mujer de 59 años, casada con el banquero Philip John May desde 1980 y sin hijos, ha ocupado desde 2010 el puesto de ministra del Interior y es parlamentaria por un distrito londinense desde 1997.

“Creo en el matrimonio. Es la institución más importante que tenemos”.

“Quiero que mi vida privada siga siendo privada. No pude tener hijos, lo asumí y seguí adelante. Espero que nadie crea que eso importa. Todavía puedo entender los problemas de la gente y preocuparme por que todos tengamos las mismas oportunidades”.

Theresa May junto a su esposo, Philip John May / Foto: AFP

May, quien en 2013 reveló que padece de diabetes tipo 1, creció en Oxfordshire y es hija única de un vicario de la iglesia Anglicana. Conoció a su actual esposo, Philip, en la Universidad de Oxford, donde estudió geografía.

“Hoy en día, a la gente solo le interesa saber cuántos famosos conoces. Antes, lo realmente importante era qué habías hecho para llegar hasta aquí”

“En tiempos duros todo el mundo debe soportar la parte de dolor que le corresponde”.

Además de su carrera política, May tiene gusto por la moda, en especial los zapatos, y alterna su tiempo libre con su hobby más conocido: su afición por la cocina.

“Me gusta la ropa y me gustan los zapatos. Uno de los mayores desafíos para las mujeres en el trabajo es ser nosotras mismas. Quiero demostrar que puedes ser una mujer lista y que además te encante la moda. No es incompatible tener una carrera profesional con irse de compras”.

A la nueva primer ministro británica le gustan los zapatos con estampados llamativos / Foto: AFP

Es reconocida por su obsesión de querer controlarlo todo a su alrededor, aunque es discreta y con un sentido de la lealtad muy alto: o conmigo, o contra mí.

“Me han contando secretos de Estado que no puedo compartirlos con nadie. Ni siquiera con mi marido”

“Brexit significa Brexit. El país ha votado que salgamos de la Unión Europea y como primera ministra pienso asegurarme de que lo hagamos”

Como ministra de Interior ha luchado contra la violencia doméstica. No obstante, se le reprocha el trato a las mujeres inmigrantes, no poniendo fin a la detención de mujeres embarazadas.

Fuente: http://www.analitica.com/