Frente al centro comercial Coliseo, en el distribuidor de La Rosaleda, un gran hueco obstaculiza el tránsito, y en horas pico ocasiona largas colas en la carretera Panamericana.La tronera cumplió más de tres años, y aunque ha sido tapada en varias ocasiones, el asfalto se deteriora al poco tiempo.
“El último arreglo fue hace ocho meses y no duró ni 30 días”, afirma Benjamín Peña, taxista de la línea El Coliseo, quien presume que el fracaso de las obras se debe a la utilización de materiales de mala calidad./GV/ac
Foto: Gioersy Mendoza