Una inspección profunda de las condiciones en las cuales se encuentran las unidades de transporte público de los Altos Mirandinos, fue exigida por algunos de los usuarios que salieron heridos luego de que un autobús se incendiara en la calle Miranda de Los Teques, hecho ocurrido la tarde del pasado martes.

“Yo me monté en ese autobús en la parada de la calle Miquilén, junto a mi hija y mi esposa, cuando empezamos a subir la calle Miranda, el vehículo empezó a fallar; yo comencé a gritarle al chofer que bajara a la gente y echara el autobús hacia atrás, para prenderlo y subir. Él siguió tratando de prenderlo y empezó a oler a gasolina”, dijo Carlos Landaeta, usuario del transporte público.

Contó que, al final de la subida, el carro volvió a apagarse “el chofer trató de prenderlo nuevamente y se prendió en candela todo. “El autobús iba lleno, no cabía un alma más, como es costumbre, no todo el mundo podía salir por la puerta principal porque ya el fuego era muy fuerte. Yo empujé a mi esposa hacia atrás, salí por la ventana, luego me lanzaron a mi hija y después a mi esposa”.

Aseguró que su hija tuvo fractura en la rodilla y que su esposa quedó con múltiples golpes. “¿quién nos va a pagar por los daños a su salud?, es una irresponsabilidad de esa gente, la línea de cubrir los gastos de quienes sufrieron daños”.

Pidió a las autoridades municipales y estadales, que realicen una inspección general de cada uno de los autobuses que prestan servicio en los Altos Mirandinos. /AT