Tres goles del holandés guiaron la remontada del club inglés en la Liga de Campeones de Europa 

El Manchester United se clasificó para los cuartos de final de la Liga de Campeones con una gran remontada ante el Olympiakos griego 3-0, en la vuelta de octavos, con un triplete del holandés Robin Van Persie. La derrota 2-0 de la ida en El Pireo había dejado al United, sumido en una gran crisis esta temporada, contra las cuerdas, pero los ingleses se reencontraron con su espíritu campeón y dieron la vuelta a la situación recordando por momentos al equipo de la etapa de Alex Ferguson.

Un penal transformado por Van Persie empezó a abrir el camino en el minuto 25 y antes del descanso el atacante holandés igualó la eliminatoria (45+1). En la segunda parte, puso el tercero en el 51. El Olympiakos luchó hasta el final, ya que un tanto le hubiera dado la clasificación por el mayor valor de los goles como visitante en caso de eliminatoria igualada, pero los ingleses no dejaron escapar su pasaje. El estadio de Old Trafford lució sus mejores galas, con un gran lleno, y el equipo dio por fin una alegría a los suyos, apenas cuatro días después del humillante revés 3-0 sufrido en ese mismo escenario en la Liga Premier ante el Liverpool.

El United es apenas séptimo en la liga inglesa, lejos de los puestos de clasificación para la próxima Liga de Campeones y ahora mismo fuera incluso de la zona de acceso a la Liga Europa, con lo que la Champions puede ser la tabla de salvación para su gris temporada. El Olympiakos, dirigido por el español Míchel, vio cortadas sus ilusiones de dar la gran sorpresa de los octavos de final y frenó su euforia, después de haberse proclamado el fin de semana matemáticamente campeón en la liga griega,

Ayer, en el 24, el griego de padre alemán y madre uruguaya José Holebas cometió un penal sobre Van Persie, que el atacante holandés se encargó de transformar en el primero de la noche (25). El segundo llegó al borde del descanso, con un pase de Wayne Rooney para Van Persie (45+1), que recibió en el área y casi sin pensar, instintivamente, envió al fondo de la red helena.

En la segunda mitad, el United no levantó el pie del acelerador y consiguió el tercero con un nuevo remate de Van Persie (51), en una jugada en la que Rooney había amagado con chutar y en la que el portero Roberto contribuyó con su falta de acierto.