Aseguran no disponer de dinero para reemplazar la reja que tumbó la GNB

Tras el enfrentamiento entre vecinos y funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana sucedido este lunes en Montañalta, habitantes de la torre 1 exigieron respuesta ante los daños ocurridos y afirmaron sentirse amedrentados por el cuerpo de seguridad que los dejó sin reja principal, cámaras de seguridad ni bombillos, “a la orden de la delincuencia”.

“A las 2:00 de la tarde la GNB arremetió brutalmente contra nuestro edificio, nos destrozaron la reja de la entrada, se la llevaron y la regalaron desde la Panamericana; de pronto ingresaron al edificio y nos dañaron dos cámaras, además de las luminarias de los pasillos, llegaron hasta el segundo piso”, manifestó una lugareña, miembro de la asociación de vecinos, que prefirió resguardar su identidad por miedo a represalias.

Dijo que es la segunda ocasión en que el edificio se ve afectado por los actos de los funcionarios, quienes hace un mes y medio destrozaron una de las cerraduras principales e impactaron perdigones en la segunda puerta principal, hecha de madera.

“Esta semana detonaron bombas lacrimógenas dentro de la edificación, donde más de un vecino tuvo que ser trasladado a un centro de salud por asfixia. Yo estoy en los últimos pisos, en un edificio de 16 niveles y hasta allá llegó la nube tóxica”.

Entre tanto, otra habitante contó que uno de sus vecinos, hijo de una persona con discapacidad, bajó a fungir como mediador entre la GNB y los residentes, y resultó detenida.

Aseguró que los daños sobrepasan la cifra de Bs. 3,5 millones. “El daño es sustancioso, algo que nos ha costado años adquirir y que no va a ser jamás de la misma calidad que antes, con la situación que atraviesa el país. Si hoy día nos cuesta cancelar un recibo de condominio, en cuánto va a venir con todas las reparaciones que hay que hacer para sentirnos protegidos, ¿quién nos responde por eso?”.

“Los guardias nos afirmaron que habían tumbado la reja, después de saber que los habíamos grabado y nos dijeron que la buscáramos por ahí a ver si la veíamos, cuando fue claro que la regalaron a una persona que pasó con una camioneta por la Panamericana”.

Finalmente, revelaron que se vieron obligados a improvisar con una reja de un pasillo que amarraron con mecates y cadenas para no quedar a la buena de Dios. “Hay que concientizar a los propietarios, tenemos algo que es una inversión de vida, no podemos permitir que ocasionen daños y queden impunes”./BN/ac/Foto: Alejandra Ávila/