Los comercios de expendio de comida, que hacen vida en la capital mirandina, se encuentran “hasta el cuello” ante la imposibilidad de costear los gastos operativos que acarrean este tipo de negocios. A ello se le suman los compromisos salariales, que los tienen a puntito de cerrar definitivamente sus puertas.

Durante un recorrido efectuado en distintos restaurantes y self services de la ciudad, se pudo conocer que muchos están haciendo un enorme esfuerzo para mantenerse abiertos al público, ya que con los aumentos de salario y el cesta ticket a Bs. 42 mil “se las están viendo negras”.

José David Figueira, gerente de un restaurante de la avenida Bermúdez, señaló que los aumentos desproporcionados e inconsultos que decreta el gobierno generan mayor desempleo. “Nos hemos visto en la necesidad de prescindir de los servicios de algunos empleados, antes teníamos 26, pero ahora nos quedamos solo con 12 porque tenemos que cumplir con los beneficios para los empleados que estipula la ley”.

Por su parte, Oswer Vargas, encargado de un local de auto servicio, manifestó su preocupación ante lo que vislumbra como un panorama muy gris. “Aquí éramos 24 y solo quedamos 8 porque la situación es insostenible. Es urgente tomar medidas y ser más conscientes de las consecuencias para las empresas; yo no puedo pagar cestatickets, pero si le doy la comida a mi personal, lo que igual implica un gran costo”.

Ambos coincidieron en que la situación se les agrava gracias a dos factores muy determinantes, que la gente ya no invierte en comer en la calle y que, además, la adquisición de los alimentos que deben preparar es cada vez más costosa y cuesta arriba; lo que los motiva a considerar la posibilidad de tener que cerrar sus negocios. /MS/no/Foto: Juan Carlos Blanco.