Representantes del movimiento Sociedad Civil Organizada de Nueva Esparta informaron que tras el análisis de muestras del agua potable que ingresa a la Isla de Margarita se confirma la presencia de bacterias fecales.
José Gregorio Mazzocchi, integrante de esta organización, indicó que el desgaste de algunas áreas en la tubería submarina facilita la contaminación del agua que consumen los neoespartanos.
“En estos últimos 6 meses hemos llevado nuevas denuncias pero ha sido cero la atención a la ciudadanía y a los problemas con el agua, nuevamente no tienen cloración y hay evidente deterioro de las tuberías principales”, precisó.
Mazzocchi, reiteró que en gran parte del estado Nueva Esparta los ciudadanos deben recurrir al pago en dólares de camiones cisternas para contar con agua en sus hogares.