Residentes que habitan en Residencias Trigo Dorado, manifestaron que al ambulatorio que allí se encuentra presenta diferentes problemas en su funcionamiento.
Una vecina relató “el médico viene de dos a tres veces por semana, es más el tiempo que pasa cerrado que abierto, tampoco cuenta con medicamentos para los pacientes”.
Aseveró que “el recinto no cuenta con tensiómetro ni equipos nebulizadores, a su vez dijo que solo realizan consultas de medicina general y pediatría”.
Un residente aseveró “también tienen problemas de infraestructura como filtraciones en paredes y techo, nunca hay agua y los baños se encuentran fuera de servicio”.
Alegó que “es necesario la reactivación del centro, ya que muchas personas de la comunidad se beneficiaban, más que todos niños y personas de la tercera edad”.
“Ojalá que más pronto que tarde las autoridades se pongan las pilas y vengan a supervisar, porque es un espacio que poco a poco se pierde y tenemos que trasladarnos a otros sitios para ser atendidos”, puntualizó./IM / Fotógrafo: Joseph Pérez