Hay 36 personas involucradas
La Justicia de Estados Unidos anunció este miércoles que destapó una trama de fraude en el sector de la telemedicina, muy popular tras la pandemia de Covid-19, en la que 36 personas a lo largo del país están acusadas de desviar 1.200 millones de dólares.
Se alega que las empresas de telemedicina -cuyo nombre o número no se menciona- acordaban con distintos médicos la prescripción de pruebas y de materiales médicos muy costosos, independientemente de si los pacientes las necesitaban, tras una breve conversación telefónica o incluso sin interactuar con ellos.
Según una nota, la acusación es resultado de una investigación federal coordinada entre el FBI, seis unidades contra el fraude en la sanidad y ocho fiscalías federales, entre otras agencias, y ha dado lugar a los primeros cargos por la facturación de pruebas genéticas cardiovasculares fraudulentas.
Los resultados de los test y materiales médicos encargados a menudo no llegaban a los pacientes o carecían de valor para sus médicos de atención primaria, agrega el documento. Con información de EFE/Unión Radio.