Profesores y alumnos cuentan con emoción sus anécdotas

La excelencia no es un acto, es un hábito, así lo dijo el filósofo Aristóteles, por lo que es preciso interiorizar que no se trata de un golpe de suerte sino la suma de pequeños esfuerzos que apuntan hacia el triunfo.

De eso es reflejo el trabajo que año tras año han realizado alumnos, docentes, obreros, personal directivo y administrativo de la Unidad Educativa Territorio Delta Amacuro, ubicada en Barola, municipio Carrizal; que este 25 de junio arriban a su aniversario 65, desde su fundación.

Ante esta importante fecha, Avance dialogó con varios de sus protagonistas para conocer de primera mano sus historias en esta emblemática institución educativa. Justo así, dimos con la profesora de Ciencias Sociales, Herminia Méndez, que lleva trabajando en el plantel 25 años.

“Es un orgullo muy grande el que siento de pertenecer aquí, a los hijos de los que fueron mis alumnos les estoy dando clases y los considero mis nietos. Es más, la actual directora fue también mi estudiante en estas mismas aulas. Estoy feliz de haber formado a todas esas generaciones, ya llevamos ocho promociones de bachilleres, antes solo teníamos hasta tercer año de bachillerato”, rememoró muy emocionada.

En su vasta experiencia, ha notado el amor que niños y jóvenes profesan al plantel y al personal que con esmero hacen de cada uno de ellos personas de bien.

Los chamos se gradúan, pero siempre vuelven de visita. Sus experiencias son la mejor referencia y eso se ve cada vez que se avecinan las inscripciones, porque la gente acude de todas partes queriendo un cupo para que sus muchachos estudien allí. Eso viene dado de la calidad que demuestran sus egresados.

Alisy Lozano, acumula una década laborando en el área administrativa, para ella resulta satisfactorio ver los avances que el trabajo en equipo ha dejado.

“La gestión de la actual directora Silvana Romero ha resultado muy fructífera, ella nos toma en cuenta a todos. Gracias a su forma de trabajo hemos logrado por autogestión algunas cosas importantes al punto que padres y estudiantes se suman voluntariamente porque han desarrollado sentido de pertenencia”, afirmó.

Los estudiantes

“Me agrada mucho estudiar en la UE Delta Amacuro, lo profesores se preocupan mucho por enseñarnos siempre, de verdad les importa nuestra educación. Ser parte de una Feria Científica es fabuloso, me gusta innovar y eso nos lo incentivan aquí desde primaria”, aseguró una de las jóvenes de séptimo grado.

Erika Anderson, estudiante del cuarto año de bachillerato, está en la institución desde noveno grado. Aseguró venir de colegios privados “la calidad que encontré aquí es inigualable, mucho mejor que la del plantel en el que estudié antes, me siento feliz y mucho mejor preparada”.

Tesoros preciosos

La institución que ahora celebra sus Bodas de Platino, es orgullo de Carrizal, porque de acuerdo con el testimonio de sus docentes, el papel que han desempeñado los estudiantes en competencias académicas internacionales, como las de Irán 2023, dejaron a Venezuela y al municipio muy bien parados.

Otro de los frutos que tiene una gran valía para toda esta familia educativa radica en frases como “No quiero irme de esta escuela nunca, aquí tengo una familia”, expresadas por alumnos de las que nunca pensaron escuchar de sus bocas.

Tal es el caso de jóvenes con hogares disfuncionales que han atravesado muchas dificultades y con ello han “rodado” por varias escuelas; hasta que han caído en manos del grupo Delta Amacuro y culminan asegurando que estar allí se ha convertido en la mejor experiencia de sus vidas; palabras que calan profundamente en el ser y sentir de toda la unidad educativa.