Entre huecos y desniveles, transportistas y conductores se ven obligados a maniobrar para evitar en lo posible el impacto que sufre el vehículo, especialmente los cauchos al transitar por la avenida Bertorelli Cisneros, específicamente frente a la entrada de residencias Imola, en la capital mirandina.
“La tanquilla que está en el canal con dirección al terminal de Los Lagos nos tiene en jaque, es muy profunda y prácticamente tiene la tapa pegada con aire porque se mueve, hace unos días caí y todo el carro se sacudió de lo hundida que está en comparación con la calle, ahora ando pendiente de esquivarla”, apuntó Gabriel Manrique, conductor.
“Los transportistas no salen ilesos”, manifestó un ciudadano que se encontraba en la parada ubicada a escasos metros.
Agregó que dos huecos y el hundimiento de una tanquilla causan estragos en los vehículos de quienes no conocen las irregularidades de la carretera, “lo peligroso es más que todo en las noches, un motorizado pela uno de los huecos y se lleva un buen susto, es importante atenderlo al ser una calle con tanta afluencia”.
Néstor Cavalieri, comisionado de Infraestructura y Derecho a la Ciudad, recordó a Avance que para realizar estos reportes la empresa de Servicios Públicos puso a disposición el siguiente número +58 412-5434193, que atenderá mediante mensajes de texto y vía WhatsApp las inquietudes de los ciudadanos.