Hombre que vive con un solo pulmón pide ayuda

Desde hace un par de años, José Ortega, de 55 años, ha presenciado en carne propia como la infraestructura de su vivienda se ha ido deteriorando con filtraciones y grietas, convirtiéndose en un peligro latente que se originó por el daño progresivo tras el colapso de una tanquilla de aguas servidas en la calle Ramón Vicente Tovar, Santa Eulalia.

El hombre quien actualmente no cuenta con empleo y tiene una situación complicada al contar con solo un pulmón, reside en el lugar con su hija y tres nietos. “No los puedo tener aquí, ellos pasan aquí el tiempo que no están en el colegio o que no están con el papá”.

Hace un año aproximadamente terminó de colapsar el espacio donde tenía el baño y la cocina, quedando prácticamente inhabilitados, y dejando pronunciadas grietas en la pared contigua a la calle principal y al callejón cercano.

En reiteradas oportunidades ha intentado tramitar apoyo para recuperar la vivienda, sin obtener más que visitas de supervisores de la Alcaldía. “En una oportunidad me indicaron que debía desalojar, pero ¿cómo? Si no tengo a donde ir, estoy prácticamente discapacitado”.

Soluciones improvisadas

Para minimizar el daño, José colocó láminas de zinc a modo de canal para que el agua de lluvia no impactara directamente con su casa.

Hace tres días una fuga de agua limpia empezó a salir en la entrada a la vivienda y luego se extendió por el resto  de la estructura. “Estoy esperando a que se vaya el agua para poder reparar, un familiar me apoyará”.

Para estos casos, se recomienda dirigirse a la Dirección de Hábitat y Vivienda, ubicada en el segundo piso de Residencias Caracas y plantear la situación, ya que lo referente a viviendas debe canalizarse a través del Ministerio.