Maricela Rodríguez, una artesana de corazón dejó estampada su huella durante su paso por la primera Feria de las Flores de Guaicaipuro, donde conquistó a los visitantes con su creatividad a través la transformación de la cinta raso, contempladas en hermosas rosas, margaritas y girasoles ideales para recuerdos o para un detalle especial.

Todo comenzó como un pasatiempo que luego mejoró con cursos básicos y que con el paso del tiempo ha evolucionado hasta formalizar su emprendimiento.

“Inicié haciendo trabajos en madera, luego aprendí la técnica de la servilleta, bordado líquido, pintura al frío, en vidrio, y poco a poco he ido creciendo, hasta que llegué aquí para promocionar mi talento expresado en un arte”.

Su participación en el evento fue gracias a la invitación del alcalde Farith Fraija. “Cuando tengo la oportunidad ofrezco mis creaciones llamadas flores eternas en las ferias, pero me gustaría tener un local un día, mientras tanto utilizo la cuenta de Instagram de mi sobrina para promocionar mis productos”.