Oso, es un peludito de aproximadamente siete años de edad, que ha padecido la maldad humana en todas sus versiones. Tuvo un dueño que jamás se ocupó de él y lo abandonó a su suerte.

Laurent Parada, proteccionista, relató a Avance que el canino mestizo “comió basura, pasó frío, sufrió maltratos de toda clase ante la mirada indiferente de todo aquel que pasaba por su lado”.
Recibió una patada en la cara y el daño fue tal que hubo que practicarle una enucleación (extracción del ojo derecho). Emprendimos la búsqueda de un temporal que lo albergara mientras conseguíamos quien lo adoptara, pero resultó peor el remedio que la enfermedad”, detalló.
El perro fue rescatado hace dos semanas en Propatria (Caracas), lo sometieron a la cirugía ocular y a una castración. Acto seguido, le encontraron hogar por una noche en El Cafetal y el 26 de septiembre apareció una ciudadana en los Valles del Tuy, de nombre Zenaida Contreras, dispuesta a alojarlo o inclusive adoptarlo.
“Luego de coordinar la logística, confiados en la buena fe de la supuesta testigo de Jehová, enviamos a Oso y la única foto que ella mostró es la de él aparentemente dormido, pero en una posición muy rígida. Después de ahí nos dijo que su hija lo había dado en adopción y desde entonces no hemos vuelto a saber de Zenaida, ni de Oso”, explicó muy consternada. Para el próximo lunes 6 de octubre procederán a interponer la denuncia ante el Cicpc, ubicado en la avenida Urdaneta. Desconocen el paradero del perro y solicitan cualquier información que lleve a dar con su ubicación, suministrarla al 0412-9954669.