22/10/15 .- Las medidas económicas anunciadas en los últimos días por el presidente Nicolás Maduro, que contemplan el aumento del salario mínimo y la fijación de un precio máximo a productos y servicios, han generado opiniones diversas entre especialistas y ciudadanos.
En cuanto al establecimiento de un costo tope, los economistas aseguran que esto podría perjudicar a los empresarios, quienes en virtud de la falta de divisas están sosteniendo sus compañías bajo una tasa de cambio que varía diariamente.
Debemos recordar que el mandatario nacional informó la noche del martes que se reformará la Ley de Precios Justos y se implementarán dos mecanismos para fortalecerla.
El primero es el Precio Máximo de Venta al Público (PVP) para los productos y servicios, basándose en el cálculo estricto de 30% de ganancia en los eslabones establecidos por ley.
Esta metodología regirá la fijación de los costos reales de producción e importación, así como el lucro mínimo en todos los procesos de distribución y comercialización.
Además, se creó una categoría especial para la protección de alimentos y servicios de salud, cuya aplicación será supervisada por un Comando Nacional de Precios Justos.
Por su parte, José Luis Álvarez, economista, explicó que actualmente los consumidores experimentan grandes contradicciones cuando adquieren los rubros, pues no hay una clara orientación sobre sus costos en el mercado y prácticamente aumentan cada semana.
“Los comerciantes deben tener una herramienta concreta para hacer sus cálculos, en función de cómo se esté moviendo la economía. Esos montos deben compensar monetariamente a la empresa para que pueda continuar produciendo”.
Consideró que ya no hay confianza en la tasa de cambio, porque esta puede variar en horas, trayendo como consecuencia que se establezcan precios con expectativas muy altas para no enfrentar pérdidas. “Se ven apretados con las restricciones a nivel de comercialización internacional. Cuando se les agota la materia prima, igualmente deben adquirirla a costos excesivos”.
Destacó que establecer precios máximos puede desanimar a los productores. “Si un ciudadano quiere iniciar una actividad económica o ya está consolidado, se verá frustrado al ofrecer sus servicios y no poder compensar monetariamente todo el esfuerzo. Por lo tanto, decidirá no emplear, reducir personal o simplemente cerrar sus puertas hasta que la situación mejore”.
De igual forma, sostuvo que todas estas reformas podrían ser un elemento de distracción electoral, por el desabastecimiento que hay en el país. “Lo que está pasando no es responsabilidad del empresario, sino de las políticas que el Gobierno nacional ha generado. Primero, deben suspenderse las restricciones sobre el sector privado para que pueda estabilizarse, así sea aumentando los precios”.
Añadió que se deben aplicar ajustes que ayuden a promover la producción en Venezuela, porque con la abundancia de oferta los precios bajan. “Muchos artículos y servicios están a tasa preferencial, mientras que el resto de la economía se basa en una libre. Los consumidores no tienen la capacidad de pagar costos tan altos”.
Asimismo, dijo que es lamentable que en un país se deba pagar hasta Bs. 400 por un producto que en cualquier otro país vale entre 1 o 2 unidades monetarias, dependiendo de la divisa. “Los ciudadanos están a la deriva, consiguen los rubros hasta tres veces más caros con el paso de los días”.
“Ojalá no se queden en palabras”
Hilda Hernández, compradora, manifestó que “ojalá no se queden en palabras y cumplan con mantener los precios. Un kilo de caraotas ya lo venden en Bs. 1.200 y la carne ni se puede llevar”.
Mientras que Julio Navas, consumidor, afirmó que el Gobierno ha hecho hasta lo imposible para proteger al pueblo del sabotaje económico. “La Sundde es claro ejemplo de que se busca el bienestar nacional, pero los inescrupulosos se han encargado de burlar la ley, tal como lo dijo nuestro Presidente”.
Entre tanto, Viviana Tosta aseveró que cada día los rubros suben y no hay nadie que le dé un parao a esto. “Una Riqueza que se compraba a Bs. 100 ya vale Bs. 300; mientras que la salsa anda por los Bs. 80 y un diablito en Bs. 330./AR/cg
Conoce otros anuncios del Gobierno nacional
- A partir del 1º de noviembre, el sueldo mínimo subirá de Bs. 7.424,66 a Bs. 9.649, y el bono que se paga por Ley de Alimentación quedará en Bs. 6.750, ubicando el ingreso mensual en Bs.16.399.
- Se incrementarán las sanciones para quienes remarquen productos, elevándose las penas de cárcel.
- Van con todo contra aquellos que fijen precios en dólar fantasma o paralelo y aseveren utilizarlo sin ningún tipo de respaldo legal.
- Fusionarán los ministerios de Industria y Comercio, para fijar una línea de producción, distribución, comercialización y vigilancia de precios.
- Asignarán 110.000 pensiones en noviembre con el nuevo salario mínimo.
Por: Adrián Rivero / FOTOS Fanny Romero
