Siete bachaqueros en estado de ebriedad fueron retirados de los alrededores del Farmatodo, en la recta de Las Minas, por supervisores del ayuntamiento que emprenden el censo antibachaqueo y funcionarios de Polisalias.

La información fue aportada por el alcalde Josy Fernández, quien dijo que los consumidores del municipio se encargan de alertar sobre los revendedores que se mantienen en las colas. “Estos ciudadanos se encargan de vender números en la fila, no permitiremos estas acciones delictivas”. El mandatario aclaró que el censo, el cual lleva más de 3.000 salienses registrados, no pretende quitarle la posibilidad de comprar a otros consumidores foráneos.

“Cualquier usuario que necesite realmente adquirir los productos, puede hacerlo. Solo estamos sacando gente que está en las colas con el fin de bachaquear, pues vulneran la tranquilidad de compra entre los clientes y encargados de los establecimientos”.

Al mismo tiempo, agradeció a los gerentes de las cadenas de supermercados nacionales y municipales, por apoyar el combate de esta problemática. “Lamentablemente las colas continúan por la crítica situación en que se encuentra el país, pero con estas medida se han reducido un poco”.

En cuanto a la respuesta de los consumidores, extendieron su apoyo a estas acciones. “Muchas madres pasan roncha, llevando sol para comprar un paquete de pañales y cuando por fin pueden comprar, los bachaqueros arrasaron con la mercancía”, expresó Margareth Arismendi.

Claman combatir colas en Carrizal

En vista de que el municipio Los Salias y Guaicaipuro han tomado medidas para neutralizar esta actividad ilícita. Los carrizaleños pidieron al ayuntamiento que le pusiera un parao a los revendedores que tienen a monte a los clientes de Freskomarket. “Las colas que se realizan son kilométricas y en la mayoría son 60% bachaqueros, necesitamos que nos ayuden con esta problemática”, agregó Víctor González, ciudadano.

La Cámara Municipal de Guaicaipuro aprobó el Decreto FGDS-I-023 emitido por el alcalde, Francisco Garcés, en el cual se prohíbe en las siete parroquias la pernocta, aglomeración y permanencia de personas en las adyacencias de comercios tanto públicos como privados, cuando estos se encuentren cerrados o no hayan colocado los productos a la venta. Quienes violen el decreto se exponen a multas que oscilan entre 20 y 30 Unidades Tributarias (Bs. 3.000 y 4.500), en conformidad con lo establecido en la Ordenanza de Convivencia Ciudadana./Adrián Rivero/sa/Foto Alejandra Ávila