Tres kilos de muslo se vendían a Bs. 4 mil hace dos días y para la mañana de este martes ya se ubicaba en Bs. 5.700, según reportaron consumidores del mercado municipal de El Paso.
En cuanto a las alas, se conoció que la tarifa se mantiene a ese mismo precio, el kilo de milanesa en Bs. 3.350 y la pechuga a Bs. 3 mil. Una fuente de un comercio, indicó que los proveedores llegaron con “tarifas nuevas” esta semana, advirtiendo que el rubro podría incrementarse en los próximos días. “La situación económica está golpeando a los mataderos y el que termina pagando los platos rotos es el consumidor final”.
Indicó que muchos consumidores optaban por hacer cola a las afueras del local ubicado por el estacionamiento del recinto popular, en vista de que salía un poco más accesible. Sin embargo, ya los montos son parecidos a otros locales.
De igual forma, señaló que a pesar de los altos costos, muchos usuarios prefieren invertir en un negocio privado por la calidad y el tamaño del rubro. “Hay expendios populares que lo pueden tener más barato, pero la gente suele irse por lo seguro y evitar problemas de higiene”.
Vale destacar, que este era uno de los alimentos más llevados por los clientes durante el año pasado, tras el aumento constante del rubro cárnico, pescado, huevos, entre otros. Para mayo de 2015, el kilo de muslo se ofertaba en Bs. 160, la milanesa a Bs. 350 y las alas a Bs. 180, de acuerdo con información del archivo de Avance.
Amas de casa “cazan” gangas
Para muchas amas de casa en Los Teques, la opción para darle un respiro al bolsillo es “cazar” las gangas que ofrecen en la avenida Miranda. La Feria Agrícola que se instala a partir del miércoles en la referida arteria vial, expende el alimento con un precio más bajo en algunas ocasiones.
De igual manera, las jornadas se extienden hasta los comunidades y parroquias los fines de semana. Otra alternativa que está resolviendo a la gente, son los mercaditos solidarios del concejal Roberto Rojas, en la cual se venden dos pollos por Bs. 500, en las diversas localidades de Guaicaipuro.
Hacen cola para conseguir regulado
Tras el repunte excesivo de los principales alimentos básicos, consumidores se apuestas en las inmediaciones de supermercados en los principales centros comerciales de la ciudad capital, para llevar una bolsa resuelta a su vivienda.
Roberto Rojas residente de la calle Páez, aseguró que cuando le corresponde comprar por terminal de cédula, sacrifica hasta 12 horas de su vida. “Los miembros de mi familia hacemos maromas para abastecernos y ayudarnos con lo que podamos”.
Marqui Ramírez se llevó una silla para hacer una fila kilométrica en el central de La Hoyada, para ver que alimentos cazaba. “Sufro de la rodilla y me han operado varias veces del estomago, pero debo buscar la comida como sea”. César Navas dijo que está pasando roncha por el desabastecimiento y debe hacer hasta dos colas diarias para llevar algo su hogar. “El problema es que muchas veces no se consigue nada”./AR/gp
