Psiquiatra señala que estos fármacos pueden traer reacciones adversas

ELIZABETH FLEURINE

En la actualidad el uso de ansiolíticos (benzodiacepinas), o mejor conocidos como medicamentos para la ansiedad y la depresión han aumentado considerablemente ya sea por la crisis económica, los problemas cotidianos o por la falta de sueño.

Sonia Castello, médico psiquiatra y sicoterapeuta explicó al diario Avance que “actualmente estamos viendo un abuso del uso de los ansiolíticos, la gente está demandando el uso de psicofármacos y muchos las toman sin previa prescripción médica.”

“Así como la cuarentena ha sido la mejor arma que tenemos contra Covid-19 también hemos visto que ha incrementado el número de personas con ansiedad y con depresión. Muchas ciudadanos y pacientes conocen el uso y el efecto de los ansiolíticos y les gusta”.

Indicó que algunas de estas sustancias actúan sobre el sistema nervioso central “que a dosis bajas producen acciones ansiolíticas como por ejemplo el benzodiacepina, que puede usarse como anticonvulsivos dependiendo de la dosis y otras para obtener efectos hipnóticos para probar el sueño.”

Precisó que psicofármacos como “el clonazepam y el diazepam son drogas de acción prolongada, eso significa que duran mas tiempo en el organismo, otras son de acción intermedia como el bromazepam y el nitrazepam y unas que duran poco tiempo como el alprazolam.”

“Se habla sobre el tiempo que dura el medicamento en el organismo porque las de corta duración como el alprazolam son más adictivas, lo que significa que las personas se pegan más a este tipo de medicamentos y llegan a sentir que dependen de ella y cuando no las toman se angustian”.

Ante esto hizo un llamado de atención a los farmaceutas que muchas veces ayudan de una u otra manera a las personas a conseguir este tipo de medicamento sin prescripción. “Estos fármacos tienen que ser manejados por especialistas, preferiblemente por neurólogos, psiquiatras o médicos internistas”.

“Las personas que toman alprazolam sin prescripción experimentan reacciones adversas como por ejemplo la somnolencia, el mareo. También pueden sentirse confusos o con falta de equilibrio al caminar y alteraciones de la memoria y constantes dolores de cabeza.”

Comentó que por este tipo de reacciones hay que tener mucho cuidado con el uso y el abuso de ansiolíticos y las dosis prescritas, “así como tampoco se deben alterar las dosis sin que el médico lo indique. Igualmente las personas que toman este tipo de medicamentos deben tener mucho cuidado al manejar para no tener accidentes al manejar por los efectos generados.”

Recalcó existen otras alternativas que se pueden emplear antes de comenzar a usar estos medicamentos, como “la meditación, la oración, la relajación muscular y la respiración profunda, el ejercicio y el yoga los te relajantes como manzanilla, el toronjil y el tilo que son bastantes ansiolíticas.” Foto: Mauricio Brendenvach.