Tequeños rechazan el bachaqueoHacer cola se ha convertido en una actividad cotidiana para muchos venezolanos. Sin embargo, para otros es un trabajo, porque los productos que adquieren en los supermercados, luego los revenden a los buhoneros, pequeñas bodegas, y trabajadores informales que tienen venta de comida en la calle. Incluso en algunas zonas de Caracas, específicamente al oeste, se ofrecen para hacer las colas, y por número cobran hasta Bs. 100 y Bs. 300, según el tiempo de espera.
En Los Teques la historia que más se repite, es la de los trabajadores informales que en un día hacen hasta varias veces una cola, en un mismo local, para adquirir harina de maíz u otros productos escasos. Por ejemplo, ayer vendieron pañales en Todoferta a precio regulado, y en el centro un buhonero los estaba revendiendo a Bs. 200. La desesperación de los padres, que no pueden hacer cola, es tal que simplemente pagan la cantidad que pide el vendedor informal.
Otro caso aislado, fue el de una dama que estaba a las afueras del Central Madeirense comprando café por paca y varios kilos de harina de trigo. Al preguntarle, el equipo del diario Avance, cómo hizo para comprar tanta cantidad, se sonrojó alegando que ella no era revendedora, sino que simplemente era una compradora.
“Es cuestión de conciencia”
Carmen Figueredo, mencionó que existen ciudadanos que no se calan las colas. “Esa es la excusa que utilizan muchos de los usuarios, quienes alegan que prefieren pagar lo que les pidan a hacer esas largas colas frente a los supermercados. Es cuestión de conciencia y comodidad. En mi caso, ayer me vine temprano, hice mi cola, y compré mi café en el Central Madeirense. Por el kilo pague Bs. 43”.
Luisa González, dijo que “yo veo como los negocios contribuyen con la escasez. Por ejemplo, las farmacias que no venden medicamentos, sino que expenden alimentos. Veo colas kilométricas para comprar siempre lo mismo. Esas colas simplemente asustan”.
Carmen Abache, indicó que “en Tejerías hay unos ciudadanos que tienen un puesto, donde venden pañales, aceite, de todo. Nos hemos querido parar, pero nos da miedo. No estoy de acuerdo con los revendedores. Honestamente, no he visto buhoneros que estén vendiendo en Los Teques”. /fp
Por: ERIKA ROJAS/rrdiarioavanceconsumo@gmail.com/Foto: Félix Laucho