09/05/15.- Desde la década de los 40, el Velorio de la Cruz de Mayo se realiza para agradecer a la madre naturaleza lo que ha dado a la población. Se trata de una celebración que también convoca a muchos seguidores en los Altos Mirandinos

En el caso de Los Teques, con la finalidad de conservar la tradición familiar y la fe cristiana, desde hace dos años Joanny Salas, vecino de Buenos Aires, viste la Cruz de Mayo tal y como lo  hizo su padre por cinco décadas. “Me tardo alrededor de tres horas y utilizó diversos tipos de papel, además siempre busco modelos por internet. Me apoyan mi esposa y mi hija”.

Indicó que esta tradición se veía mucho en las escuelas en épocas anteriores. “En mis tiempos de estudiante, en mayo se le cantaba a ella y a la Virgen; tengo entendido que en la región costera son muy seguidores de la costumbre”. Además, apuntó que los jóvenes de ahora no le prestan mucha atención a estas festividades.

Relató que tras finalizar los arreglos, coloca la cruz en un pequeño altar y la mantiene allí durante todo el año.

Blanca Hernández, habitante de La Macarena, señaló que el 3 de mayo acude a la iglesia y realiza los rezos. “Lo hago todos los años con toda mi familia, en vísperas de la celebración”. También concuerda con Salas al aseverar que es necesario retomar la tradición entre los adolescentes, ya que de esta manera se inculcan valores a los chamos.

Es importante destacar que en diversas regiones del país celebran el evento con décimas y fulías.

Por: Andreina Ochoa/Foto: Andreina Alemán