En el consultorio popular Luis Esteban Pérez, ubicado en la comunidad El Vigía las quejas del personal del consultorio se han vuelto recurrentes por las necesidades y carencias diarias que les impiden prestar un servicio óptimo.

Un trabajador de la institución fue consultado por el equipo reporteril del Diario Avance y expresó que “aquí se trabaja a doble turno en la mañana y en la tarde. Hay servicio de odontología y medicina general, aunque hay muy pocos recursos porque la Alcaldía no ha hecho la distribución desde hace tiempo”.

Comentó que “aquí con lo único que contamos es con el recurso humano, pues no hay suministro de medicamentos e incluso muchos han recurrido a traer sus propios tratamientos para así aplicarlos”.

Expresó que “trabajamos porque tenemos un deber moral con la institución y con la profesión. Nuestra riqueza es la satisfacción de atender y ayudar en cuanto a salud, sin embargo, nos sentimos con las manos atadas porque no se nos dan las condiciones que nosotros como profesionales merecemos, al igual que los usuarios”.

Precisó que “la infraestructura del servicio médico está en muy mal estado, los equipos están obsoletos, la electricidad falla constantemente e incluso algunas áreas no cuentan con ningún tipo de iluminación”.

“Es lamentable porque está situación se ha ido agravando desde hace como tres años y todo ha derivado en que grandes profesionales abandonen sus cargos con la intención de buscar mejores condiciones en las cuales ejercer”.

Enfatizó que “queremos ayudar a la población, por lo que tratamos de hacer lo mejor posible con lo que tenemos. Implementamos algunos de los programas del Ministerio de Salud como control de niño sano, prenatal e incluso se realizan las consultas de medicina integral donde se atienden en ambos turnos a más de 30 personas diariamente”.

Precisó que es necesario atender los consultorios populares, pues “funcionan a modo de filtro antes de ir a un hospital. Acá se debe prestar medicina preventiva de calidad, que apoye el trabajo que se pueda realizar en otra institución, pero si no existe un mayor compromiso en las labores de la salud, lo único que se hará es cerrar puertas en lugar de abrirlas”. /JC. Fotografía: Mauricio Brendenvach