Al menos dos personas murieron, entre las que se encuentra el atacante, y nueve resultaron heridas en un tiroteo que tuvo lugar este domingo en una iglesia mormona en Grand Blanc, Michigan.
Un hombre de 40 años entró en la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días durante la misa. Según informes oficiales, el atacante irrumpió en la iglesia y disparó indiscriminadamente a los presentes, asesinando a una persona e hirió a otras nueve, entre estos varios niños. La iglesia, además, fue incendiada.
El recinto religioso estaba lleno de cientos de personas que habían acudido al servicio a las 10:25 de la mañana.
El hombre prendió fuego a la iglesia luego de los disparos, lo que generó el caos total. El incendio destruyó gran parte de la iglesia. La rápida intervención de la policía logró neutralizar al hombre, que fue abatido por los oficiales en el lugar, mientras los bomberos se encargaban de las llamas.
Las autoridades locales, junto con el FBI y la ATF, investigan los motivos del ataque. La comunidad está consternada por lo ocurrido en este lugar de culto. Las autoridades han pedido a los vecinos que eviten la zona.








