El alcoholismo en las mujeres ha ido en ascenso y se ha venido estudiando este incremento tomando en cuenta los factores sociales que contribuyen a que sea un fenómeno invisibilizado.

La psicóloga María Armas, señaló al Diario Avance que existe una mayor desaprobación y sanción social para la mujer ebria que para el hombre. “

“Este juicio social proviene del papel que se le atribuye a las mujeres y a las expectativas que se colocan sobre ellas en cuanto al cumplimiento del rol establecido y esta percepción social explica algunos aspectos del perfil adictivo de la mujer alcohólica”, explicó.

Manifestó que la bebida clandestina, sobre todo en las amas de casa, dificulta el registro de los casos y el diagnóstico precoz de la conducta adictiva. “Por lo general acuden a consulta presionadas por sus familiares”.

“La bebida recurrente en las mujeres suele tener variados motivos, algunos de ellos son eminentemente de origen emocional, como intento de afrontar, evitar sentimientos o experiencias negativas como la frustración, la soledad y las crisis de pareja”.

Añadió que es frecuente en mujeres de edad avanzada el consumo de medicamentos como sedantes, somníferos, analgésicos y medicamentos contra la ansiedad y es un riesgo mezclarlos con el alcohol.

“Algunos trastornos mentales asociados directamente al abuso de alcohol en las mujeres son la depresión, la ansiedad, la psicosis, el trastorno bipolar y las conductas suicidas”, puntualizó./ EF/rp Foto: Kelvin Izquierdo