La actividad física y mental contribuyen a mantener ágil el cerebro
ELIZABETH FLEURINE
Enfermedades no controladas como la diabetes, la hipertensión arterial y un estilo de vida sedentario pueden hacer que un paciente con Alzheimer registre una mayor o menor gravedad en los síntomas.
El médico neurólogo e investigador Ciro Gaona señalo que “las mejores formas de mantener activo el cerebro es ejercitarse tanto física como espiritualmente, compartir con otras personas y aprender cosas nuevas”.
“Ya con bailar solo, aunque siempre es mejor en pareja, con moverse por la casa o realizar actividad física organizada, que es lo que llamamos ejercicio, tendremos un mejor cerebro en comparación con quien está sedentario. Cada vez que nos ejercitamos estamos produciendo neurotransmisores que no resuelven nuestros problemas, pero que ayudan a enfrentarlos”.
Agregó que además de esto, dormir bien y cuidar la alimentación son hábitos que ayudan a conservar las reservas cognitivas cerebrales frente al Alzheimer.
“Cada minuto este órgano cambia y podemos hacer que sea para bien. La generación de nuevas neuronas es un proceso que, incluso, continúa en personas que tienen más de 90 años, según han demostrado los estudios científicos”.
Asegura que “la alimentación también es importante para preservar el buen estado del cerebro, este órgano funciona con glucosa y oxígeno para mantenerlo saludable, por ello necesita proteínas y grasas como el omega 3, que se encuentran en alimentos como los frutos secos y los pescados”.
“Podemos retrasar los síntomas o evitarla con actividad física, mental. espiritual y de lo que ya mencionamos que es el cultivo del vínculo social porque cerebro que se aísla, neurona que se deteriora”. EF/ct Foto: Kelvin izquierdo