Muestras de dolor se evidenciaron en el sepelio de Adriana en Cementerio Monumental. La madre de la joven que perdió la vida el domingo desea que su hija se convierta en símbolo de paz y unión.

Amy Torres. “Queremos que Adriana sea un símbolo de paz que permita la unión del país, que sea la última víctima de la violencia que arropa a una Venezuela que ve caer a sus ciudadanos sin ningún color político”, fueron las palabras de la madre de Adriana Grissel Urquiola Pérez mientras colocaba un manto blanco sobre el ataúd en representación de la paz, justo antes de abandonar la capilla Imperial de la Funeraria Vallés.

Las muestras de dolor y el llanto no pararon durante el velatorio, que se desarrolló en Caracas, desde donde partió a las 12:00 pm con destino al Cementerio Monumental de Los Teques el cortejo fúnebre, el cual fue escoltado por más de 60 vehículos particulares, unas 20 motos y cuatro camionetas, dos dispuestas por Venevisión y dos por parte del Cuerpo de Bomberos de Miranda.

Tanto familiares, amigos, exalumnos como compañeros de trabajo de la joven lucían prendas blancas, mientras que a los vehículos les colocaron cintas del mismo color, además de grafitis en los que se leían frases como: “Justicia para Adriana y Álex Adrián SOS Venezuela”, “Te amamos Adriana”, “Hasta luego”.

Álex Ruiz, esposo de Urquiola, exhortó a quienes pierden a un ser querido producto de la violencia “a que se llenen de fuerza y valor y sigan adelante porque la vida continúa, y esas personas que fatalmente pierden la vida se convierten en los ángeles guardianes de sus familiares”.

En tanto que Ileana Urquiola, hermana de Adriana, contó que recibió todo el apoyo del embajador de España, que se encargó personalmente de realizar las gestiones para trasladarla a ella y a su esposo, quienes llegaron el martes al país. Asimismo, aprovechó para enviarle un mensaje a todos los venezolanos: “Primero procuremos que haya paz, pues ningún acto de violencia hará cambiar las cosas. Todos tenemos que pensar en el otro antes de actuar, como lo hacía mi hermana que lo asumió como una forma de vida, y por eso se dedicaba a una labor tan importante y única que era mantener una comunidad sorda informada”.

Consorven la despidió como una de sus mejores intérpretes

El consejo directivo, profesores y estudiantes adscritos a la Confederación de Sordos de Venezuela (Consorven) acudieron al velatorio a fin de despedir a quien calificaron como “una de sus mejores intérpretes de Lengua de Señas Venezolana en el nivel consolidado”.

Daniel Díaz Durán, tequeño y exalumno de la joven, la recordó como una “excelente persona que lo ayudaba en todas sus materias cuando cursaba bachillerato en la Escuela de Sordos de Los Teques. Ella, incluso, me animó a prepararme como intérprete. Por eso siento tanto dolor por su muerte y la de su bebé. Adriana siempre estaba dispuesta a ayudar a los demás. Era muy alegre y atenta”. A las 2:00 pm, arribó el cortejo al Monumental, desde donde se elevó una oración, en la que también participaron las personas con discapacidad auditiva que colmaron los espacios.

Niños, jóvenes, adultos, mujeres, hombres y personas de la tercera edad no pudieron contener el llanto durante la despedida, en la que se le rindió un minuto de aplausos porque “así se despide a los grandes. Tengo paz y más orgullosa no me puedo sentir de Adriana. Gracias a todos por haberla amado como lo hicieron”, dijo Manuela Pérez, su madre; al tiempo que entre lágrimas su hermana no paraba de repetir: “¡Eres la mejor!, ¡Dios te bendiga, Álex Adrián!”./sa/Foto: Félix Laucho