Los asesinos del supervisor agregado Leandro José García Blanco (42), pertenecen a una peligrosa banda cuyo modus operandi para cometer atracos en los kilómetros iniciales de la vía Panamericana, mantiene en zozobra a habitantes altomirandinos.

Se trata de un nutrido grupo de delincuentes que, mayormente en la noche, acciona sus armas contra vehículos que transitan la citada arteria vial, para hacer que sus conductores pierdan el control del volante y así perpetrar los robos. Tal y como denunciaron lugareños, se pasean con armas largas por la comunidad y mantienen gariteros que vigilan el paso de carros militares y policiales.

La madrugada de este domingo, los delincuentes atacaron a tiros a una patrulla de Polimiranda, en la que iban hacia Caracas cinco funcionarios miembros de la Unidad y Control de Reuniones y Manifestaciones Públicas, para prestar apoyo al Maratón CAF. El oficial García Blanco, que iba de copiloto, recibió un balazo en el ataque y pese a que fue atendido enseguida en el Periférico de Coche, murió minutos después de su ingreso.

Las investigaciones para dar con el paradero de los responsables de este crimen, están a cargo de funcionarios de la División Contra Homicidios del Cicpc en Caracas, quienes laboran en conjunto con Polimiranda.

A esta pandilla también se le sindica el homicidio del oficial del la Policía Nacional Bolivariana (PNB), Ángel Rafael Figuera Solís (22), a quien ultimaron con un disparo de fusil el pasado 26 de febrero cuando cerraba el canal rápido en la Panamericana. Del operativo realizado para capturar a los victimarios del PNB, resultó abatido un sujeto apodado “El Mono”, uno de los autores materiales de este asesinato./Glorimar Fernández