La falla paralizó el escrutinio, llevando a la presidenta del CNE a culpar a “problemas técnicos” en medio de peticiones de nulidad
La situación política en Honduras se ha agravado debido a la parálisis del escrutinio tras las elecciones, lo que ha disparado la incertidumbre post-comicial y las denuncias de fraude. La crisis se centra en la caída del sistema de cómputo del Consejo Nacional Electoral (CNE), un evento que ha puesto en pausa el conteo de votos.
La presidenta del CNE de Honduras abordó la interrupción del conteo, atribuyendo la caída del sistema a “problemas técnicos ajenos al pleno” del organismo. Sin embargo, esta explicación no ha logrado calmar los ánimos, ya que la falla técnica se produjo en un momento clave del proceso, alimentando la desconfianza y las especulaciones sobre la transparencia del proceso electoral.
La prolongada parálisis en el escrutinio ha generado un clima de alta tensión social y política, llevando a la solicitud formal de nulidad de los comicios por parte de varios sectores y partidos de oposición.








