Emprendedores vendieron estatuillas, franelas, camisas, llaveros

La canonización del doctor José Gregorio Hernández y de la madre Carmen Rendiles no solo conmovió profundamente a los venezolanos al otorgarles dos nuevos santos reconocidos por la Iglesia Católica, sino que también impulsó la comercialización de artículos votivos para conmemorar esta importante fecha entre los feligreses.

Un grupo de emprendedores, dedicados a la promoción de la fe mediante la elaboración de artículos como estatuillas, franelas, camisas, llaveros, dijes y pulseras, aprovechó la ocasión no solo para generar ingresos, sino también para dar a conocer sus obras de arte que llevan implícita su profunda fe.

En los municipios Carrizal y Los Salias, el mercado religioso tuvo menor movimiento, siendo un punto la parroquia San Antonio de Padua, ubicada en el Pueblo de San Antonio, donde a las afueras del templo realizaron venta de franelas con estampados de San José Gregorio Hernández, así como las acostumbradas ventas de bollos y alimentos para picar.

En Los Teques, la Catedral San Felipe Neri se dedicó exclusivamente a la oración, por cuanto sus espacios adyacentes fueron el lugar de una vigilia que comenzó la noche del sábado, sin presencia de vendedores.

Por el contrario, en la Iglesia El Carmen, sí se congregó un grupo de comerciantes. Entre ellos destacó Tolentino Quintal, de 80 años, quien exhibió réplicas de la iglesia de Isnotú, elaboradas en cartón y foamy a un precio de Bs. 200.

Flores a montón Los negocios de floristería se vieron significativamente favorecidos por la ocasión, ya que muchos hogares engalanaron sus altares con arreglos de rosas blancas y amarillas, junto con abundante follaje, para acompañar la veneración de San José Gregorio Hernández. Los precios reportados por los vendedores ubicados en La Hoyada y en la calle Cecilio Acosta fueron de $1.50 por flor individual y $5 por ramo con papel decorativo.