Cerca de 300 temas conforman el patrimonio artístico del cantautor
Sentimiento, transparencia y personalidad es lo que transmite el músico y cantautor cojedeño José Manuel Falcón, intérprete y escritor de un sinfín de composiciones dedicadas dentro del género de la música venezolana a la mujer en toda su esencia, a la naturaleza y, por supuesto, a nuestro hermoso país.
A este insigne maestro se le atribuye la autoría del famoso y recordado tema que lleva por nombre “Aquel”, inmortalizado en la voz de Simón Díaz.
“Soy el menor de trece hermanos, quienes junto a mis padres encabezaban los más famosos parrandones navideños en la aldea donde nací; se les conocía como ‘La Falconera’. Evidentemente yo no me quise quedar atrás y desde muy chiquito, sentía una muy marcada inclinación musical”.
Rememoró que en el patio de la casa, su padre y hermanos mayores colgaban en una troja sus instrumentos de parranda, para que el más pela’o de todos no los alcanzara para tremendear.
“Todos en mi núcleo familiar han sido músicos autodidactas y de corazón. Cuando cumplí cinco años, para iniciar la fase escolar nos mudamos a Tinaquillo y fue ahí donde tras conocer una agrupación de música venezolana y a Pedro Emilio Sánchez, decidí a qué me iba a dedicar el resto de mi vida: defender y difundir por siempre nuestro género; aunque mención aparte disfruto de cantar rancheras”.
Sin descuidar sus deberes escolares, el pequeño José Manuel, de manera natural, dejaba fluir pequeños escritos que venían de su más profunda inspiración. “Eran cositas sueltas, se las mostraba a mis hermanos mayores y me daban el visto bueno”. Cuando vino a Caracas para estudiar bachillerato, siguió con la pasión vivita por la música venezolana en general y combinó ambas actividades.
“Recuerdo que llegamos a El Guarataro, me quedaban cerquita varias estaciones de radio y hasta allá iba yo a parar para presenciar la transmisión de los programas. Ahí comencé a conocer diversos cantantes del género y eso me fascinaba, a los 16 años compuse mi primer tema de lleno, un vals venezolano llamado “Como ayer”; de ahí para acá he compuesto cerca de 300 canciones entre gaitas, joropos y demás ritmos que comprenden el gran universo de nuestra música criolla”.
Explicó que no solo hizo llegar sus escritos a sus hermanos, sino a Pedro Emilio Sánchez, reconocido compositor cojedeño que apreciaba el talento de Falcón. “Conseguir de ese maestro una aprobación a mis creaciones era maravilloso, me enorgullecía. Una canción que escribí, llamada ‘Arroyito viajero’, iba a ser grabada por Héctor Cabrera, quien para mí fue uno de los mejores cantantes de música llanera que ha parido esta tierra, pero no se logró porque lamentablemente falleció”.
Pero José Manuel, ya con 20 años de edad, sintió la necesidad de ir más allá de la composición y emprendió un reto: aprender a tocar el cuatro. Como es zurdo, representaba todo un desafío para él, pero lo asumió y se le dio de una manera extraordinaria; resultando la combinación perfecta para su otro don, que lo llevó a convertirse en el cuatrista predilecto de varias agrupaciones de la época, tales como Miguelito Rodríguez, Henry Rubio, Salomón Villegas, Alfredo Sadel, entre otros.
Éxitos a granel
Con la simpatía que lo caracteriza, manifestó con un deslumbrante brillo en la mirada el origen del tema que lo catapultó. Se trata de una canción proyectada en la voz de Simón Díaz, que luego grabaron Cruz Tenepe y Teo Galíndez, la cual es reconocida a lo largo y ancho del territorio nacional con el nombre “Aquel”, hoy con más de 30 versiones en su haber.
“Ese tema tiene un gran significado emocional para mí porque se lo escribí a mi madre, que falleció en 1979; ella muy celosa me decía que entre tantas cosas que escribía no le había compuesto un tema. Dejé pasar el tiempo, porque uno cree que la madre es inmortal, hasta que le llegó el momento de partir de este mundo y no alcancé a hacérselo en vida”.
Surgieron muchos borradores, pero una mañana llegó a su mente, viviendo ya aquí en Los Teques, donde se radicó en casa de un hermano tras la muerte de su mamá, una hermosa letra inspirada en ella. Habían pasado ya dos años de su partida. “Emprendí con recursos propios mi producción discográfica, con maqueta en mano recorrí varias disqueras para ver quién me editaba el disco que llevaba mi letra y música”.
“En 1984 fui a una disquera llamada La Discoteca, presenté mi propuesta y gustó mucho, pero me pusieron en pausa porque estaban tratando de pegar a un muchacho que recién se lanzaba al ruedo musical, Luis Silva. En ese preciso instante que estaba sonando el tema que le compuse a mi mamá, entró a la oficina Simón Díaz, oyó lo que estaba sonando y pidió que se la repitieran; preguntó de quién era, ellos me señalaron y me presentaron”.
Una vez que entraron en conversación, Tío Simón le pide a José Manuel que le permita grabar ese tema porque le había cautivado y porque estaba preparando una nueva producción que ya contenía nueve canciones y le hacía falta una; el cojedeño respondió: “Maestro, con todo respeto, mi tema lo amo y no es para relleno de ningún disco”.
Simón Díaz le manifestó: “Ningún buen tema, como lo es ese, sería relleno jamás, démelo y lo comprobará”. ¡Y vaya que no se equivocó!, porque ese se convirtió en el puntal de esa producción, en 15 días estaba sonando su canción por todas partes y en un mes ocupaba los primeros lugares de las carteleras musicales, al punto de que hoy sigue vigente entre todos los venezolanos.
Más vigente que nunca
Actualmente, el maestro Falcón emprende de la mano del gran arpista tequeño, Abelardo Mérida, su quinta producción discográfica denominada Saltimbanqui, que podría ver luz primero en la zona llanera y occidental de nuestro país, a mediados de este año, y progresivamente vendrá hacia el centro de Venezuela para calar en el gusto y preferencia de todos los amantes de la música criolla.
“Yo le compongo a todo, sobre todo a la mujer que es mi principal musa, ella es el atractivo más hermoso que puede haber en la Tierra”.
Manifestó que la ciudad de Los Teques tiene un gran significado para él, por ello aún vive acá, aquí ha cosechado un cúmulo de grandes amistades en el ámbito musical. Refirió que el Ateneo de Los Teques y la sala Emma Soler han sido importantes tribunas de sus presentaciones en la ciudad del clima ideal. Extendió un mensaje a defender primero lo nuestro porque sencillamente es lo mejor y más importante para nosotros./Maribel Sánchez/ac/Foto: William Sánchez/