Redujeron el margen de ganancia para poder seguir a flote

DORIANA BORREGO

El panorama actual no ha sido amigable para los comerciantes que día a día se enfrentan a tasas de tributos cada vez más altas; los establecimientos del sector licorero no han sido la excepción, por lo que distintos empresarios del área han manifestado las dificultades existentes para gestionarse entre impuestos y sanciones cada vez más complicados de cubrir.

“Somos uno de los rubros que genera más tributos a las alcaldías porque la tasa de impuestos es más alta y estamos sujetos a una supervisión mayor de parte de los cuerpos de seguridad, además, nuestras multas y sanciones son mucho más elevadas”.

Así lo indicó un dueño de licorería Los Altos Mirandinos, que por temor a represalias por parte de las autoridades, prefirió mantener su nombre en anonimato.

“Existe la creencia de que las licorerías son una mina de oro, pero lo que no saben es que es un sector que ha sobrevivido al disminuir los márgenes de ganancia. Lo estipulado por la ley es que dicho margen alcance el 30%, pero la realidad es que la mayoría de las licorerías trabajamos al 10%”, agregó.

Destacó que las sanciones se han centrado únicamente en quienes laboran en los comercios, dejando de lado al resto de los ciudadanos que también deben tomar cartas en el asunto y mejorar la convivencia ciudadana.

“Las leyes de convivencia ciudadana son aplicadas con más dureza al comerciante, más no para quienes ingieren las bebidas en los alrededores de las licorerías, cuando la realidad es que todos somos responsables de manejar las cosas con responsabilidad”, dijo. Agregó que los trámites para mantenerse al día con toda la parte legal siguen siendo un tema que genera discordia, ya que “las licencias de venta no son renovadas con regularidad, estamos en constante amenaza porque la apertura de licencias no esta habilitada y si te retiran la tuya es todo un tema, a pesar de que, a estas alturas del año, no han dado una fecha para firmar las licencias y permisos de licores, así seguimos siendo una presa fácil a la hora de cualquier supervisión”./at