Cada vez son mayores las dificultades que deben enfrentar médicos y personal de enfermería del Hospital Victorino Santaella (HVS), puesto que ni siquiera cuentan con insumos básicos que permitan atender -de forma adecuada- a las docenas de pacientes que diariamente acuden hasta sus instalaciones.
Cada vez son mayores las dificultades que deben enfrentar médicos y personal de enfermería del Hospital Victorino Santaella (HVS), puesto que ni siquiera cuentan con insumos básicos que permitan atender -de forma adecuada- a las docenas de pacientes que diariamente acuden hasta sus instalaciones.
Un médico especialista señaló que pese a que la directiva del HVS, asegura a través de los medios de comunicación, que se encuentran operando de manera óptima y sin ningún tipo de problemas, la verdad es que los profesionales de la salud no cuentan con insumos necesarios para atender las emergencias.
Tras un recorrido por las instalaciones, los galenos aseguraron que deben ingeniárselas, reinventarse y ahorrar al máximo lo poco que puedan conseguir, porque la ausencia de material y de medicamentos en el hospital se ha incrementado de forma alarmante.
“Es muy común recibir pacientes con politraumatismo, pero más común aún es utilizar una sonda –que no es la recomendada- para chequear si se presenta algún tipo de lesión. Nosotros debemos ingeniárnosla porque se trata de la vida de un ser humano”.
Señaló que otro de los graves problemas con los que cuentan es la inexistencia de material para realizar radiografías de tórax. “Tampoco tenemos antibióticos. Los familiares ahora deben correr a farmacias distintas a la del hospital -porque acá tampoco hay medicamentos- a comprar el que requiera su ser querido”. Denunció que en oportunidades se han visto en la obligación de suturar con las manos, puesto que no se les garantizan los indumentos necesarios. “Aquí ante una emergencia no le podemos decir que no a un paciente”.
Ni papelería para récipes ni historias clínicas
Por si fuera poco, los médicos en el Hospital Victorino Santaella no cuentan ni siquiera con material de oficina. “Acá debemos traer nuestros lápices, bolígrafos, no hay ni siquiera hojas para realizar anotaciones básicas y, mucho menos papelería para elaborar, llenar o hacer seguimiento a las historias clínicas”. El doctor aseguró que una y otra vez deben reutilizar las hojas de vida. “Es lamentable que un centro hospitalario con tan grandes potencialidades se encuentre en este estado de desidia, porque ni siquiera se le puede llamar abandono”.
Por su parte, Marilyn González, familiar de un paciente, señaló que para lograr obtener un récipe para comprar un medicamento, el médico tuvo que recoger uno usado y arrugado que se encontraba en el suelo y, prescribir sobre él. “La verdad admiro la labor de estos jóvenes médicos que dan la cara por el HVS. Pese a todas las dificultades continúan atendiendo de forma cordial a quienes lo necesitamos”, concluyó./Gustavo Bastardo/Foto: Luis Vasquez
