“Tengo una semana sin tomarme mi tratamiento para la hipertensión porque no consigo Losartán Sódico de 50 miligramos, he recorrido más de 12 farmacias y en ninguna hay disponibilidad”, indica Moisés Castillo.
Agrega que incluso se ha visto en la necesidad de solicitarle a sus familiares del interior que lo ayuden en la búsqueda y en zonas como Puerto Ayacucho, Valencia y Caracas tampoco hay. Sostiene que la situación se ha tornado tan difícil que ha tenido que adquirir otra presentación del producto, Losartán Potásico, el cual no se encuentra regulado y lo venden en Bs. 60. “Vine a consultarle al farmaceuta si es posible que me sustituya la medicina”. Nilsa Briceño señala que cuando no consigue sus medicamentos en Fundafarmacia del hospital Victorino Santaella tiene que visitar hasta cinco establecimientos. “Uno se cansa de tanto caminar”.
María Torres revela que Rivotril, recetado para la depresión y los nervios, está desaparecido del mapa. “Se esfumó de San Antonio, Los Teques, y del Seguro Social desde hace meses y donde se consigue lo ofrecen a un costo súper elevado, además restringen la venta a uno por cliente”. Carmen Jiménez expone que “el Quetidin de 20 miligramos, medicina indicada para los pacientes epilépticos, brilla por su ausencia desde hace dos semanas”./Andreina Ochoa.-/ sa /