Un grupo de representantes se apostó frente a la UE Boyacá para mostrar su rechazo hacia la Colección Bicentenario, la cual aseguran representa un atropello contra los derechos de los niños. “No permitiremos que jueguen con la mente de nuestros hijos, ya basta de tanto abuso”, sentenció una de las madres
Con pancartas en mano, un grupo padres y representantes se apostó frente a la Unidad Educativa Boyacá, en rechazo al programa de adoctrinamiento que, a su juicio, se está tratando de implantar a través de la Colección Bicentenario. “¡Si llegan esos libros a los colegios privados, los vamos a quemar!”, exclamó Naiyit Sabat, quien consideró el contenido de estos textos como un atentado al libre pensamiento. “Esos libros están arraigados en los ideales de izquierda”.
“Ellos saben que los niños son como una esponja que absorben todo. ¿Por qué no hacen lo mismo con los adultos? No les conviene pues a nosotros no nos pueden engañar tan fácilmente”. Andrea Dos Santos pidió respetar los derechos de los pequeños a tomar sus propias decisiones, teniendo en cuenta las consecuencias de sus acciones.
“No quieren que los muchachos sean inteligentes. El presidente habla de respeto y amor, pero en realidad no cumple lo que predica, lo único que hace es pisotearnos cada vez más”. María Gómez indicó que “esto es una imposición y yo soy una de las personas que no lo acepta. Nacimos libres y tenemos que morir de la misma manera. Hace años éramos felices y no lo sabíamos”.
Para Zuleima Herrera, la educación en Venezuela dio un paso atrás. “Trabajamos muy fuerte para darles a nuestros hijos lo que nunca tuvimos, y ahora el Gobierno quiere lavarles el cerebro. No deseo una Cuba para mis chamos”./CV/ac/Foto: Eduardo Aguilar