El gigante tecnológico Samsung Electronics se comprometió hoy a pagar compensaciones a sus proveedores de varios países por la retirada del mercado del “smartphone” Galaxy Note 7 tras reiterados casos de ignición de terminales.
La firma surcoreana expresó en un breve comunicado que abonará “una rápida compensación” tras hacer una evaluación de los inventarios de sus empresas asociadas en varios países de todo el mundo.
Samsung no especificó la cantidad de la remuneración al alrededor de 70 proveedores por las piezas y componentes fabricados o en proceso para el Galaxy Note 7 y que finalmente no se utilizarán.
Las contrapartidas a proveedores de la multinacional podrían alcanzar hasta 300 millones de wones (unos 241 millones de euros / $266 millones), según una estimación de expertos del sector publicada por la agencia surcoreana Yonhap.
Samsung Electronics decidió a principios de este mes retirar del mercado el Galaxy Note 7, ya que continuaban incendiándose algunos dispositivos a pesar de la revisión a gran escala iniciada en septiembre y que supuestamente debía haber puesto fin al problema.