El gas, el agua y el transporte son pésimosFallas con el gas, el agua, la luz y hasta el servicio de transporte público enfrentan a diario los habitantes de las residencias Alto Verde.

El vital líquido empezó a llegar con irregularidad hace dos meses, por lo que viven en una sequía constante o tienen que madrugar para llenar tobos y pipotes.

“A veces duramos hasta una semana sin agua, nos la envían de madrugada y casi no alcanzamos a llenar. ¿Quién se va a parar a esa hora?”, expresó Mónica Pérez.

La situación ha venido en declive desde que uno de los cables de la bomba principal se averió, y hasta ahora no han tenido respuesta alguna de las autoridades.

“Una boca de lobo parece esto en la noche, da miedo salir después de las 7:00 pm a hacer cualquier cosa”, manifestó María Cañizales, ante la falta de alumbrado en las principales calles.

Enfatizó que los bombillos se han ido dañando poco a poco, situación que Corpoelec no se ha dedicado a resolver, a pesar de los llamados de la comunidad.

La maleza también es un dolor de cabeza. Es tanto lo que ha crecido en los últimos meses, que la carretera principal parece una selva. “Recuerdo que hace tiempo fue que vinieron a cortarlo, un señor de la comunidad es quien se encarga de medio limpiar y mantener los jardines, pero ya el monte es algo que requiere de ayuda mayor”, recalcó Cañizales.

Asimismo, el camión del gas no está asistiendo de manera regular y las unidades de transporte se tardan una eternidad en pasar, especialmente los fines de semana./ac

Por: Yordys Méndez Fernández/Foto: Edgar Jiménez