Un nuevo capítulo se escribió en la historia del mediático robo de joyas ocurrido durante la última edición de los premios Goya, cedidos por la Academia de Cine de España. Un técnico de iluminación se entregó el jueves a la policía y devolvió los bienes valorados en unos 30 mil euros.

El sujeto de 50 años acudió a una comisaría por su propia cuenta, según señaló el viernes una portavoz de la policía de Madrid. El hombre estaba acompañado de uno de los organizadores de los premios, que son el equivalente español de los Oscar de Hollywood.

El español, que no tiene antecedentes penales, iba a ser interrogado a lo largo del viernes, dijo la portavoz.

La prensa española informó que un anillo, unos aros y unos gemelos prestados por una joyería habían desaparecido de una habitación del hotel madrileño desde el que se retransmitió la gala el pasado sábado. Todas los accesorios se encuentran ya en poder de la policía.