El transformador sumergible que se dañó en la avenida Bermúdez y que mantiene sin luz a un centenar de comercios desde hace casi una semana aún no ha sido restituido.

“Desde Corpoelec nos dicen que el aparato viene de Valencia y que lo colocarán este sábado. Todos estos días nosotros hemos resuelto con planta. Pagamos combustible a precio internacional en la bomba CVP de La Hoyada y tenemos que equipar entre tres y cuatro veces al día, se puede imaginar usted el gasto adicional que hemos tenido que asumir”, declaró a Avance José Antonio Pineda, encargado de una carnicería.

Los dueños de algunos locales se ven obligados a cargar en sus casas los puntos de venta y cruzar los dedos para que la carga logre cubrir toda la jornada laboral.

La trabajadora de una tienda de accesorios de celulares contó que venden a “ciegas”, por ejemplo el que compra un cargador se lo tiene que llevar sin probarlo.

El propietario de un expendio de pollo y carne aseveró que durante estos seis días que no han tenido energía eléctrica limitaron el pedido de la mercancía. Solo adquieren lo justo y lo necesario para evitar que se dañe por la falta de refrigeración.

En un establecimiento reportaron que dos impresoras resultaron averiadas y esto lo atribuyen a la falla que se originó en horas de la mañana del pasado sábado 16 de septiembre.

María Evangelina Hernández, manifestó que el miércoles se dirigió a la oficina de Banesco ubicada en el bulevar para hacer un depósito en dólares y abrirle una cuenta a su hijo menor de edad y se encontró con que todo estaba a oscuras. Una fuente de Corpoelec señaló a este medio de comunicación que el gerente ha estado pendiente del transformador, de manera reiterada ha preguntado por la entrega, pero todavía se desconoce cuando llega./RP