28/07/15.- Niños, padres, docentes, comerciantes, universitarios y demás integrantes de la sociedad son necesarios para que la lucha que llevan grupos protectores, a fin de evitar que el abandono de animales se convierta en un problema de salud pública, siga dando frutos en los Altos Mirandinos.

Hoy en día, el esfuerzo de fundaciones y particulares, que se han sensibilizado en favor de darles un hogar o refugio a los animalitos en condición de calle, se ha propagado entre muchas familias de la subregión; no obstante, cierto sector de la población continúa irrespetando sus derechos.

La figura del perro comunitario es reconocida hoy en día y apoyada por diversas instituciones. Esta consiste en alimentar a los canes, velar por su salud, así como darles calor y cariño, sin necesidad de mantenerlos en casa, de modo que los temas de espacio o atención de animales de raza que permanecen en los hogares dejen de ser un obstáculo para que se les tienda una mano a los desposeídos.

Este concepto se multiplica en construcciones, estacionamientos, veredas y comunidades. Un ejemplo claro se observa en el Mercado Municipal de El Paso, donde concesionarios, compradores y otros trabajadores velan, cada quien por su lado, por los perritos que allí son abandonados.

Miranda: Ejemplo internacional

En el 2011, la entidad fue reconocida en el I Congreso Internacional de Zoonosis, que se celebró en Buenos Aires, gracias al programa Miranda Libre de Rabia, mediante el cual se inmunizan a canes y gatos contra esta enfermedad.

Según lo destacó Yerubí Beitía, coordinadora regional de la División de Zoonosis, durante los primeros seis meses de este año, fueron vacunados 5.000 animales contra la rabia en toda la región.

“Los niños juegan un papel importante en todos los temas que se refieren a lograr una mejor sociedad, es por ello que este programa está instalado en las escuelas desde hace varios años. Desde allí les damos las herramientas, para que luego las difundan en sus hogares, sobre el cuidado, protección, importancia de la vacunación y el aporte que hacen al mundo cuando le abren las puertas de sus hogares a algún animal abandonado”.

Este departamento organiza jornadas de esterilización e inmunización en diferentes comunidades, tal y como lo informó la encargada, quien también recordó que “mascota significa buena suerte y quien se anima a tener una, especialmente a adoptarla, tendrá un amuleto duradero”.

Dejar atrás la “mentalidad vanidosa”

Con motivo de la conmemoración del Día del Perro Callejero, que se celebró ayer, la veterinaria Nelly Andrade, quien desde hace 32 años atiende a todo tipo de animales en su consultorio, en la calle Ayacucho de Los Teques, invitó a la comunidad a sumarse a la cultura de adopción.

“La mentalidad del venezolano es muy vanidosa, se prefiere a los perros de raza que a los mestizos, y no es por discriminar o mostrar preferencias, pero por experiencia propia y de personas cercanas, puedo asegurar que no hay animal más fiel que un mestizo”, declaró mientras atendía en su consulta a un cachorrito gris que acababa de ser rescatado de la calle por una jovencita, y que tras un buen baño y afeitada, lucía como un can de raza distinguida.

La especialista denunció que actualmente algunas personas, que profesan religiones ligadas al sacrificio de animales, incrementaron sus prácticas usando gatos, palomas y gallinas. “En comparación con años anteriores, notamos que las autoridades realizan un mejor trabajo, están más atentas al cuidado y prevención, pero es importante que aborden este tema que sigue preocupando a quienes defendemos la vida de estos seres”.

Por: Glorimar Fernández/Fotos: Fanny Romero