Serios problemas con el servicio de agua potable presentan los habitantes de la comunidad carrizaleña Barrio Bolívar desde hace varios meses. Destacaron que se las tienen que ingeniar para hacer las labores diarias.

Contaron que se han convertido en unos expertos en rendir el vital líquido, cuyo suministro lo reciben solo una vez a la semana en un horario algo reducido. “A veces hay que escoger entre lavar la ropa y limpiar la casa”, dijo una vecina.

Esta falla es más grave hacia la parte alta del sector. Lugareños de la parte baja aseguran tener un suministro constante, aunque en algunas oportunidades sí les aplican racionamiento.

Moraima Pérez indicó que solo les colocan el agua una vez a la semana y tienen que estar bastante pendientes, pues lo pueden hacer los miércoles o jueves sin previo aviso.

“Siempre tiene que haber alguien en casa que esté revisando, porque uno no sabe cuándo se la van a poner, a veces la dejan un día, otras medio día. Incluso en ocasiones la colocan solo dos horas. Uno tiene que organizarse para que le rinda”.

Fallas de alumbrado

 Otro problema presente en este sector son las carencias en el alumbrado público, ya que algunos postes no están funcionando y varias zonas quedan a oscuras.

“En la calle principal tenemos algunos postes con fallas, eso ya tiene tiempo así, no son todos, pero después de las 6:00 pm sí hay bastante oscuridad”, dijo Karina Franco, habitante de la parte baja./ac

Foto: Jesús Chacón